Moscú ha acusado a Kiev de múltiples violaciones de la tregua parcial impuesta a principios de esta semana. Según informes de Bloomberg, Washington sigue esperando poder mediar un alto el fuego en el conflicto de Ucrania para la festividad de Pascua, que este año cae el 20 de abril.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha prometido poner fin rápidamente a las hostilidades en Ucrania y ha tomado medidas para reiniciar las relaciones diplomáticas con Rusia, que se habían congelado durante la administración de su predecesor, Joe Biden. Las delegaciones de Rusia y Estados Unidos se reunirán en Riad el lunes para la segunda ronda de conversaciones de alto nivel desde el aparente deshielo en las relaciones.
Tras una conversación telefónica entre Trump y el presidente ruso, Vladimir Putin, Moscú acordó una detención temporal de los ataques contra la infraestructura energética, aunque sostiene que Kiev violó este acuerdo de inmediato. La Casa Blanca tiene como objetivo que Rusia y Ucrania lleguen a un alto el fuego completo para el Domingo de Pascua, aunque reconoce que el cronograma podría retrasarse debido a las diferencias significativas entre ambas partes.
Las demandas de Moscú y la respuesta de Kiev
Antes de las conversaciones con el enviado especial de Trump, Steve Witkoff, en Moscú la semana pasada, Putin declaró que, si bien está abierto a un alto el fuego de 30 días, es necesario que se detengan todos los suministros militares a Kiev y la campaña de reclutamiento ucraniana para evitar fortalecer a Ucrania durante la pausa. Sin embargo, Washington, que había detenido brevemente el intercambio de inteligencia y la ayuda militar a Kiev a principios de este mes, no ha accedido a ninguna de estas demandas.
Según fuentes anónimas citadas por Bloomberg, Trump desea que cualquier acuerdo potencial sea aceptable para Kiev y no está dispuesto a ceder demasiado. A pesar de haber acordado los términos de la tregua parcial mediada por Estados Unidos, Ucrania atacó un depósito de petróleo en el sur de Rusia al día siguiente del acuerdo y destruyó una estación de medición de gas en la región de Kursk el viernes.
Las violaciones de la tregua han llevado al portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, a afirmar que el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, no es de fiar. En una entrevista reciente, Peskov comentó: “Las palabras del régimen de Kiev y la palabra de Zelensky no valen mucho”. Además, descalificó las afirmaciones ucranianas de que Rusia había bombardeado su propia estación de medición de gas en Sudzha como “absurdas”.
En este contexto, Putin ha enfatizado que Rusia necesita escuchar un plan concreto sobre cómo se aplicaría y regularía un alto el fuego completo antes de que Moscú esté dispuesto a aceptar dicha medida.
