La nueva era de la programación: el «vibe coding»
En octubre de 2023, el programador español Javi López creó un juego llamado *Angry Pumpkins* sin escribir una sola línea de código. Este hecho resalta un cambio significativo en la forma de abordar la programación, ya que el juego fue generado a través de la inteligencia artificial ChatGPT, que desarrolló el código HTML y Javascript a partir de simples instrucciones en español. López destaca la efectividad de esta herramienta y cómo, al final, lo que comenzó como una exploración lúdica se ha convertido en un ejemplo de la nueva era de la programación asistida por IA. Junto a su cofundador Emilio Nicolás, López también cofundó MagnificAI, una plataforma que mejora imágenes y cuya mitad del código fue creada por inteligencia artificial, vendida posteriormente a Freepik.
La llegada del concepto de «vibe coding», acuñado por el reconocido programador Andrej Karpathy, ha abierto un debate en la comunidad de desarrolladores. Según Karpathy, esta nueva forma de programación se basa en dejarse llevar por las sensaciones y comunicarse de manera natural con la máquina, en lugar de escribir código en sí. Esta tendencia ha suscitado reacciones encontradas; por un lado, muchos programadores se sienten amenazados por la idea de que la IA pueda realizar tareas que antes requerían conocimientos técnicos profundos. Por otro lado, como señala López, la programación con herramientas como Cursor permite a los usuarios expresar sus necesidades en lenguaje natural, facilitando así la creación de aplicaciones y sitios web de manera más accesible.
El impacto de la inteligencia artificial en el ámbito de la programación también se compara con su influencia en otras profesiones creativas. Mientras ilustradores, escritores y actores se enfrentan a la transformación de sus oficios, los programadores están igualmente llamados a adaptarse. Aunque la calidad del código generado por la IA puede ser un tema de discusión, López y otros expertos coinciden en que estas herramientas no solo aceleran el proceso de desarrollo, sino que también fomentan una mayor creatividad al permitir que los profesionales se centren en la conceptualización y el diseño en lugar de en el código en sí. En este sentido, la programación asistida por IA se perfila como una vía para democratizar el acceso a la creación de software, donde el conocimiento técnico se convierte en un complemento, más que en un requisito indispensable.
