Las lavadoras son esa clase de electrodomésticos que son imprescindibles en casa, pero, a pesar de ello, casi nadie presta demasiada atención cuando necesita una y va a su tienda de confianza a comprarla.
A diferencia de la televisión que, si se escoge con más cuidado atendiendo a la tecnología, a las pulgadas, tipos de entradas, etc., lo usual es comprar la primera lavadora que vemos que entra en nuestro presupuesto.
Las marcas top tienen un mejor servicio técnico
Una lavadora Samsung siempre va a tener un mejor servicio técnico que otra de marca poco conocida. Estas marcas suelen hacer talleres de formación, en los cuales instruyen a los profesionales en las nuevas tecnologías que usan y en cómo se arreglan sus fallos más comunes.
Además, está el tema de los repuestos difíciles de encontrar en lavadoras de marca dudosa, que incluso pueden desaparecer en unos años (lo cual no pasa con un gigante como Samsung).
Hay que escoger lavadoras del tamaño adecuado
Por norma general, las lavadoras domésticas tienen tamaños que van desde los 6 a los 12 kilos. Esa cifra indica la ropa que se puede lavar a la vez y es muy importante, en especial en el caso de familias numerosas. Para un soltero, o una pareja sin hijos, servirá una lavadora de 6 kilos. Sin embargo, en las familias con hijos lo mejor es optar por tamaños mayores, de al menos 10 kilos.
Un error bastante común es comprar una lavadora pequeña, de forma que acaba sobrecargada a menudo. Con el tiempo, la correa que hace girar el tambor se partirá, o incluso habrá problemas con los rodamientos.
Las lavadoras con tecnología inverter ayudan a ahorrar energía
Muchas lavadoras ya traen motor inverter. Este funciona por inducción magnética, eliminando las escobillas de los motores estándar.
Esto consigue que alcancen la clase de eficiencia energética más alta, ahorrando mucha electricidad a lo largo de su vida útil. Además, esa menor demanda de energía ayudará a que no “salten los plomos” si la potencia contratada en casa es algo justa.
Otra ventaja de estos motores es lo silenciosos que son. Vibran menos que los tradicionales, por lo que pueden evitar más de un problema en las comunidades de vecinos, en especial si ponemos la lavadora por la noche.
El inicio diferido es muy útil
Entre las funciones que traen las lavadoras nuevas (no viene en todas), una de las más útiles es el inicio diferido. Gracias a él, se puede dejar la lavadora cargada con la ropa, el detergente y el suavizante y escoger la hora a la que va a empezar a lavar.
Por ejemplo, eso sirve con el fin de que la lavadora funcione en las horas en las que la electricidad está más barata, o para que lo haga de tal forma que termine cuando llegamos a casa, pudiendo tender la ropa o meterla en la secadora.
Así, las prendas no pasan horas mojadas en el tambor de la lavadora, algo que hará que tengan un olor a humedad poco agradable.
