
Un reciente estudio liderado por NatureServe ha revelado que más del 22% de los polinizadores nativos en América del Norte se encuentran en un riesgo elevado de extinción. Este análisis, pionero en su enfoque taxonómico, evaluó casi 1,600 especies, incluyendo abejas, escarabajos, mariposas, polillas, moscas de flores, murciélagos y colibríes. Los hallazgos subrayan la creciente crisis de biodiversidad que afecta a los ecosistemas y la seguridad alimentaria.
Publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, el estudio destaca varios puntos clave:
- Uno de cada cinco polinizadores en riesgo: El 22.6% de las especies evaluadas enfrenta un riesgo elevado de extinción, lo que subraya la necesidad urgente de conservación.
- Abejas amenazadas: El 34.7% de las especies nativas de abejas están en peligro, siendo las abejas cortadoras de hojas y las abejas excavadoras las más amenazadas.
- Murciélagos vs. colibríes: Todas las especies de murciélagos polinizadores están en riesgo, mientras que todos los colibríes presentan un bajo riesgo de extinción.
- Puntos críticos geográficos: Las concentraciones más altas de especies en riesgo se encuentran en el suroeste de Estados Unidos, correlacionándose con una alta riqueza de especies y factores de estrés relacionados con el clima.
- Amenazas principales: El cambio climático, la agricultura, la pérdida de hábitat y el desarrollo urbano son las principales amenazas que varían regionalmente a lo largo de América del Norte.
Los polinizadores son vitales para la producción de alimentos y la salud de los ecosistemas, contribuyendo anualmente con más de 15 mil millones de dólares a la agricultura norteamericana. La disminución de estos insectos amenaza no solo la biodiversidad, sino también la estabilidad de los sistemas alimentarios y los medios de vida humanos. Sin acciones de conservación dirigidas, la pérdida de polinizadores podría tener efectos en cascada sobre la reproducción de plantas, las poblaciones de vida silvestre y los servicios ecosistémicos.
Acciones urgentes para la conservación de polinizadores
- Para los responsables políticos: Integrar los polinizadores en riesgo en los Planes de Acción para la Vida Silvestre de los Estados y otras estrategias de conservación y gestión para asegurar financiación y protecciones.
- Para los gestores de tierras: Priorizar la conservación de hábitats como praderas, arbustales y bosques que apoyen a las comunidades de polinizadores más amenazadas. Implementar mejores prácticas para reducir las amenazas provenientes de la agricultura, el desarrollo urbano y el cambio climático.
- Para el público: Adoptar prácticas favorables a los polinizadores, como reducir el uso de pesticidas, plantar flores nativas y crear hábitats que proporcionen alimento y refugio a los polinizadores durante todo el año.
En una entrevista, el coautor del estudio Jaret Daniels, curador de Lepidoptera en el Museo de Historia Natural de Florida, discute las implicaciones de los hallazgos. A pesar de la creciente urbanización y las amenazas mencionadas, Daniels destaca la importancia de la diversidad de plantas y la necesidad de un enfoque colectivo para proteger a los polinizadores. La gestión adecuada de espacios urbanos y suburbanos, así como la creación de jardines que fomenten la biodiversidad, son pasos esenciales para mitigar el impacto de la pérdida de hábitat.
La situación de los polinizadores es alarmante, y la urgencia de actuar se hace cada vez más evidente. La integración de estrategias de conservación en todos los niveles de la gestión de paisajes es fundamental para asegurar no solo la supervivencia de estas especies, sino también la estabilidad de nuestros ecosistemas y sistemas alimentarios.