
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha reafirmado que la Unión Europea no levantará las sanciones impuestas a Rusia mientras persista el conflicto en Ucrania. Durante unas conversaciones en Arabia Saudita, se discutió la posibilidad de revitalizar la Iniciativa de Grano del Mar Negro, un acuerdo que busca facilitar la exportación de productos agrícolas ucranianos a cambio de la eliminación de restricciones occidentales sobre el banco agrícola ruso y otras instituciones financieras implicadas en la venta internacional de alimentos y fertilizantes.
La postura de la UE ante las sanciones
En una entrevista reciente con la cadena francesa LCI, von der Leyen subrayó que las sanciones son «muy significativas» y «dolorosas», y que están teniendo un impacto considerable en la economía rusa. «Representan una poderosa palanca», afirmó, al ser cuestionada sobre la posibilidad de que la UE accediera a las demandas de Moscú para levantar algunas de estas restricciones.
La presidenta de la Comisión Europea dejó claro que las sanciones permanecerán vigentes «hasta que se establezca una paz justa y duradera en Ucrania». Sin embargo, también indicó que, una vez finalizado el conflicto, podría considerarse la eliminación de las sanciones.
Para que el conflicto llegue a su fin, von der Leyen destacó la necesidad de «garantías de seguridad para Ucrania», así como de «una base industrial de defensa sólida y una fuerza disuasoria» dentro de la UE. Estas declaraciones reflejan la postura firme de Bruselas en relación con la situación en Ucrania y su compromiso con la defensa de la soberanía ucraniana.
La Iniciativa de Grano del Mar Negro, que fue mediada por la ONU y Turquía en julio de 2022, tenía como objetivo garantizar el paso seguro de productos agrícolas ucranianos a cambio de que Occidente levantara las restricciones sobre las exportaciones rusas de grano y fertilizantes. Sin embargo, Moscú se retiró del acuerdo un año después, alegando que Occidente no había cumplido con sus obligaciones. Tanto Estados Unidos como Rusia ven la reactivación de este acuerdo como un paso hacia la resolución del conflicto en Ucrania.
En días recientes, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que la economía de su país se ha convertido en la cuarta más grande del mundo en términos de paridad del poder adquisitivo, a pesar de las 28,595 sanciones impuestas por Washington, Bruselas y sus aliados. Según datos del gobierno ruso, la economía creció un 4.1% en 2024, superando las previsiones oficiales del 3.9%.
Putin también ha instado a los círculos empresariales rusos a no esperar que las sanciones sean levantadas por completo, describiéndolas como un mecanismo de presión estratégica que Occidente tiene la intención de seguir utilizando.