
Un reloj de la capilla del Gonville and Caius College de la Universidad de Cambridge ha recuperado su manecilla horaria, que fue sustraída en una broma estudiantil durante la década de 1930. La historia de este peculiar robo ha permanecido en el anonimato durante décadas, hasta que recientemente se ha revelado la identidad de uno de los involucrados: Geoffrey Hunter Baker, un estudiante de lenguas modernas que cursó sus estudios en Cambridge entre 1934 y 1937.
La travesura se llevó a cabo bajo la oscuridad de la noche, cuando Baker y un cómplice, cuyo nombre se desconoce, reemplazaron las manecillas del reloj de la capilla con réplicas de cartón. Mientras que Baker se quedó con la manecilla horaria, su compañero retuvo la manecilla de los minutos. En 1999, tras el fallecimiento de Baker, su hija, Trixie Baker, heredó la manecilla horaria, que ha permanecido en su posesión hasta su reciente entrega.
En un acto de homenaje a la historia del colegio, Trixie Baker devolvió la manecilla, que ahora se encuentra en el Archivo del Colegio, junto a otras anécdotas de travesuras estudiantiles, conocidas como “rags”. Trixie comentó que las réplicas de cartón funcionaron bien hasta que llovió, lo que pone de relieve la naturaleza efímera de la broma.
James Cox, archivero del colegio, expresó su satisfacción al conocer las hazañas estudiantiles, que forman parte de la rica y variada historia de la institución. Aunque no se fomenta la realización de este tipo de bromas, Cox se mostró contento de recibir relatos de travesuras que no han causado daño permanente y cuyos protagonistas han logrado graduarse.
A pesar de la recuperación de la manecilla horaria, la manecilla de los minutos sigue desaparecida. El Gonville and Caius College ha solicitado a cualquier persona que tenga información sobre su paradero que se comunique con el Archivo del Colegio.
Fundado originalmente como Gonville Hall en 1348 por Edmund Gonville, el colegio fue refundado en 1557 por John Caius, adoptando el nombre actual. A lo largo de su historia, ha sido escenario de numerosas bromas y travesuras. Entre ellas, destaca la «broma del cañón» de 1921, en la que estudiantes del Gonville and Caius trasladaron un cañón de artillería alemán a un lugar destacado del campus. Otra famosa travesura tuvo lugar en 1958, cuando un grupo de estudiantes de ingeniería colocó una furgoneta Austin Seven en el techo del Senate House, el edificio ceremonial de la Universidad de Cambridge donde se celebran las graduaciones.