
El agua limpia y segura de los lagos es una parte fundamental de la identidad finlandesa. En las últimas décadas, ha aumentado el interés por la calidad de estas aguas, especialmente ante los nuevos desafíos que plantea el cambio climático y el uso del suelo. La proliferación de cianobacterias, consecuencia de la eutrofización, se espera que sea un fenómeno cada vez más frecuente en el futuro.
A pesar de que se invierte una cantidad significativa de recursos públicos y privados en la restauración de lagos, estos esfuerzos no siempre producen los resultados deseados. En este contexto, la investigación doctoral del M.Sc. Jaakko Litmanen en la Universidad de Jyväskylä ha aportado conocimientos valiosos sobre la composición de la comunidad de fitoplancton en el lago Vesijärvi y sobre la dieta de los zooplancton, específicamente de los crustáceos como los copépodos calanoides y los daphnidos, durante un periodo de siete años.
El papel crucial del zooplancton en los ecosistemas acuáticos
Litmanen enfatiza que las interacciones entre la comunidad de fitoplancton y el zooplancton son cruciales para el control de las floraciones de cianobacterias. Utilizando métodos de modelado basados en biomoléculas, como ácidos grasos y pigmentos producidos por algas, ha logrado ofrecer un nuevo enfoque para estudiar la composición de estas comunidades y las preferencias alimenticias del zooplancton.
Los daphnidos suelen ser los principales consumidores de algas en los lagos y han sido objeto de extensos estudios. Sin embargo, los copépodos calanoides, que pueden ser los consumidores dominantes de algas en ciertas épocas del año, han sido en gran medida desatendidos debido a las dificultades para cultivarlos en laboratorio. Esta omisión ha dejado un vacío en nuestra comprensión de cómo el zooplancton influye en la comunidad de fitoplancton.
En el lago Vesijärvi, los daphnidos generalmente consumen la comunidad de fitoplancton disponible sin mostrar una fuerte selectividad, mientras que los copépodos calanoides son altamente selectivos en su elección de grupos de algas. Litmanen ha observado que estos copépodos pueden reducir significativamente la abundancia de algas de alta calidad, lo que a su vez crea oportunidades para que prosperen algas de menor calidad, como las cianobacterias. No obstante, los copépodos también proporcionan un alimento de alta calidad para los peces, mitigando así el impacto general de las algas de baja calidad en la red trófica.
El monitoreo rutinario de comunidades de fitoplancton suele centrarse en la identificación de especies mediante microscopía, a pesar de que el interés principal a menudo reside en las cianobacterias. Litmanen propone que el análisis de ácidos grasos y pigmentos puede reemplazar la identificación microscópica lenta y costosa cuando no es necesaria una identificación a nivel de especie. Esto sugiere que en el futuro se debería prestar más atención a la red trófica en su conjunto, en lugar de enfocarse únicamente en especies individuales, al estudiar los impactos del cambio climático y planificar medidas de restauración.