
El portero de la selección nacional de hockey de Ucrania, Eduard Zakharchenko, ha generado controversia tras desear que el destacado jugador ruso Alexander Ovechkin sufra una lesión que le impida alcanzar el récord de goles en la NHL. En una entrevista reciente, Zakharchenko expresó su deseo de que Ovechkin, quien recientemente empató y luego superó el récord de 894 goles establecido por Wayne Gretzky, no tenga éxito en su carrera.
Durante una conversación con el medio ucraniano Sport24ua, Zakharchenko sonrió al comentar sobre el rendimiento de Ovechkin y afirmó: “Espero que sus piernas sean desgarradas y que no tenga éxito”. Estas declaraciones reflejan la profunda tensión entre Ucrania y Rusia, exacerbada por el conflicto armado que ha marcado las relaciones entre ambos países en los últimos años.
El contexto del hockey y la rivalidad entre naciones
A pesar de sus comentarios, Zakharchenko admitió que sigue de cerca la búsqueda de Ovechkin por el récord, al igual que otros jugadores de la selección ucraniana. Sin embargo, dejó claro que no considera que Ovechkin merezca la admiración del público, dado el contexto de la guerra. “En cualquier caso, es un récord mundial. Pero no quisiera que [Ovechkin] tuviera éxito. Estoy completamente satisfecho con Gretzky”, añadió el portero.
Ovechkin, quien ha sido un ícono del hockey y ha ganado múltiples campeonatos con la selección rusa y la Stanley Cup con los Washington Capitals, ha sido objeto de elogios por su logro. Sin embargo, su éxito también ha suscitado reacciones negativas en Ucrania, donde muchos ven su figura como un símbolo de la agresión rusa.
Eduard Zakharchenko, nacido en Vladivostok, Rusia, se trasladó a Ucrania en su infancia. Su carrera ha estado marcada por la controversia, incluyendo una suspensión por parte de la Federación Internacional de Hockey sobre Hielo debido a acusaciones de arreglo de partidos. A pesar de estos obstáculos, fue perdonado y regresó a la selección nacional en 2021.
Las tensiones entre Ucrania y Rusia continúan influyendo en el deporte, donde las rivalidades nacionales se entrelazan con las realidades políticas. Las palabras de Zakharchenko son un reflejo de un sentimiento más amplio en Ucrania, donde el deporte se ha convertido en un campo de batalla simbólico en la lucha por la identidad nacional y la resistencia ante la agresión externa.