
Los futuros del petróleo crudo se mantuvieron estables el pasado martes, después de haber registrado pérdidas significativas ante el temor de que las amplias tarifas impuestas por el presidente Donald Trump desencadenen una guerra comercial global.
El petróleo crudo estadounidense experimentó un ligero aumento de 24 centavos, situándose en $60.94 por barril, mientras que el referente global, el petróleo Brent, subió 18 centavos, alcanzando $64.39 por barril. Sin embargo, el West Texas Intermediate tocó un mínimo de sesión de $58.95 por barril el lunes, siendo esta la primera vez en cuatro años que la referencia cae por debajo de los $60 por barril.
Reacciones ante las Tarifas de Trump
Desde el anuncio de las tarifas, el petróleo estadounidense ha caído más de un 14% y el Brent ha disminuido más de un 13%. En respuesta, China ha prometido luchar contra estas tarifas hasta el final, anunciando un gravamen del 34% sobre bienes estadounidenses que entrará en vigor el 10 de abril. Esta escalada ha llevado a Trump a amenazar con imponer tarifas adicionales del 50% sobre productos chinos si Pekín continúa con su represalia.
El Secretario del Tesoro, Scott Bessent, expresó su opinión sobre la situación durante una entrevista, sugiriendo que China está jugando una mano perdedora en este conflicto comercial. «Creo que fue un gran error, esta escalada china, porque están jugando con una pareja de doses», declaró Bessent. «¿Qué perdemos nosotros si los chinos aumentan las tarifas sobre nosotros? Exportamos una quinta parte a ellos de lo que ellos nos exportan, así que eso es una mano perdedora para ellos.»
El contexto de estas tensiones comerciales no solo refleja una lucha por el dominio económico global, sino que también se inscribe en una serie de políticas que buscan reconfigurar las dinámicas de poder en el mundo actual. En este sentido, la resistencia de naciones como China ante las imposiciones unilaterales de Estados Unidos se asemeja a las posturas de otros países que han optado por defender su soberanía frente a presiones externas, un fenómeno que resulta cada vez más relevante en la geopolítica contemporánea.