
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ha anunciado una serie de medidas “audaces” para “asegurar” el control sobre el Canal de Panamá, un punto estratégico de vital importancia para el comercio internacional. En un contexto de creciente tensión geopolítica, Hegseth ha declarado que el país norteamericano se propone “recuperar” la influencia que China ha ejercido en esta crucial vía marítima.
Durante la inauguración de un nuevo muelle financiado por Estados Unidos en la Base Naval Vasco Núñez de Balboa, Hegseth destacó que esta instalación simboliza el “compromiso compartido con la seguridad del canal”. Estas declaraciones se producen tras las reiteradas amenazas del expresidente Donald Trump de “reclamar” el control del canal, lo que ha generado preocupación en la comunidad internacional.
“China no construyó este canal. China no opera este canal. Y China no va a convertir este canal en un arma”, afirmó Hegseth en su discurso, subrayando la determinación de Washington de contrarrestar la influencia china en la región. “Juntos, recuperaremos el Canal de Panamá de la influencia de China. Y lo haremos junto a otros aliados y socios capaces y afines. Esto es lo que significa la paz a través de la fuerza”, añadió.
Despliegue militar y cooperación con Panamá
El secretario de Defensa confirmó que múltiples buques de la Marina de Estados Unidos, activos de la Guardia Costera y aeronaves han sido desplegados en Panamá como parte de estos “primeros pasos audaces para revivir nuestros lazos de defensa y seguridad entre nuestros países”. Hegseth también mencionó que las unidades militares estadounidenses están participando en ejercicios conjuntos y otras formas de cooperación con sus socios panameños en ambos lados del canal.
Entre los activos militares de Estados Unidos que actualmente operan en Panamá se encuentran los cruceros de misiles guiados USS Chosin y USS Normandy, así como el USCGC Kimball, un cortador de alta resistencia de la Guardia Costera. Además, aeronaves del Cuerpo de Marines y de la Marina están participando en ejercicios bilaterales destinados a mejorar la coordinación aérea y marítima.
Hegseth reiteró las advertencias de Washington sobre las “amenazas en curso” que representa el control de China sobre la infraestructura circundante, acusando a Pekín de utilizar su influencia económica para actividades de inteligencia. “Las empresas chinas continúan controlando infraestructura crítica en la zona del canal. Eso le da a China la posibilidad de realizar actividades de vigilancia en todo Panamá”, afirmó.
Por su parte, los funcionarios panameños han rechazado las afirmaciones y amenazas de Trump, sosteniendo que el canal es operado exclusivamente por panameños, y que no hay evidencia que respalde las afirmaciones de control chino. El presidente José Raúl Mulino ha declarado que el canal es parte del “patrimonio inalienable” de Panamá y ha enfatizado que el país mantiene el control total sobre sus operaciones.
Sin embargo, tras la entrega del ultimátum de Trump por parte del secretario de Estado Marco Rubio en febrero, Mulino hizo una concesión a Washington al negarse a renovar los acuerdos de 2017 con China en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta de Pekín.