Los Estados miembros de la Unión Europea han aprobado un paquete de medidas de represalia para contrarrestar los aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre el acero y el aluminio provenientes del bloque europeo. Estas contramedidas, que entrarán en vigor la próxima semana, no abordan los aranceles del 20% que se aplican a todas las exportaciones de la UE, los cuales comenzaron a regir el miércoles pasado.
Trump ha acusado repetidamente a la UE de tratar a Estados Unidos de manera “desfavorable” y, el mes pasado, introdujo un arancel del 25% sobre los metales, argumentando que esta política está dirigida a naciones que imponen altas barreras a los productos estadounidenses. Aunque la Comisión Europea no ha revelado la lista de productos afectados ni los niveles de aranceles, informes de medios citando documentos internos sugieren que las medidas abarcarán una amplia gama de productos estadounidenses, incluyendo aves de corral, granos, ropa y metales. La mayoría de estos productos enfrentará un arancel del 25%, mientras que algunas categorías estarán sujetas a un 10%.
Detalles de las medidas y el contexto económico
Según un comunicado emitido por la Comisión Europea, las contramedidas del bloque entrarán en vigor el 15 de abril. Diplomáticos europeos con conocimiento directo de la decisión han indicado que solo Hungría se opuso al paquete, mientras que los otros 26 miembros lo respaldaron. Se estima que el volumen de las importaciones estadounidenses afectadas será ligeramente inferior al volumen de las exportaciones de la UE que están bajo los aranceles estadounidenses, alcanzando aproximadamente 22 mil millones de euros (23.800 millones de dólares) al año.
El bourbon fue excluido de la lista de productos debido a la presión ejercida por Francia, Irlanda e Italia, después de que Trump advirtiera que un arancel sobre esta bebida podría desencadenar un gravamen del 200% sobre el alcohol europeo. La Comisión ha calificado los aranceles estadounidenses como “injustificados y dañinos”, causando perjuicios económicos a ambas partes y a la economía global. Además, ha señalado que las contramedidas podrían ser suspendidas “en cualquier momento” si Estados Unidos acepta un “resultado negociado justo y equilibrado”.
Las actuales medidas no abordan la decisión de Trump de imponer un arancel del 20% sobre todas las exportaciones de la UE, que se implementó como parte de lo que él ha denominado “aranceles del Día de la Liberación”, ni su reciente arancel del 25% sobre los automóviles. La Comisión se encuentra preparando un segundo paquete de medidas de represalia para responder a estos aranceles, que podría ser presentado tan pronto como la próxima semana, según ha informado el portavoz comercial Olof Gill.
Trump ha anunciado aranceles globales de gran alcance, argumentando que son necesarios para restaurar la equidad en el comercio internacional y acusando a otras naciones de “estafar” a Estados Unidos mediante “políticas perjudiciales”. En sus declaraciones, ha calificado a la UE como “comerciantes muy duros” y ha afirmado que las empresas estadounidenses pagan más de 200 mil millones de dólares al año en impuestos sobre el valor añadido en Europa. Además, ha advertido sobre la posibilidad de implementar más medidas si el bloque europeo decide retaliar.
El aumento de las tensiones comerciales ha inquietado a los mercados globales y ha suscitado preocupaciones sobre una posible recesión mundial.
