El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, ha expresado su preocupación por lo que considera una reescritura de la historia por parte de los países occidentales, en un contexto de creciente hostilidad hacia Moscú. En una reciente entrevista, Lavrov afirmó que Europa está nuevamente «tomando las armas» contra Rusia, sugiriendo que esta actitud recuerda a las causas de conflictos globales pasados, como las Guerras Napoleónicas y las dos guerras mundiales.
Lavrov argumentó que las acciones agresivas de Europa han sido el desencadenante de numerosas tragedias a nivel mundial. En su discurso, destacó que durante la Segunda Guerra Mundial, muchos países europeos que se declaraban neutrales, así como aquellos alineados con la Alemania nazi, participaron activamente en la lucha junto a los nazis, mencionando específicamente a Francia.
La obsesión de Occidente por derrotar a Rusia
El ministro ruso también criticó a Francia y al Reino Unido, acusándolos de estar «obsesionados» con la idea de derrotar a Rusia en el campo de batalla. Esta obsesión, según Lavrov, se refleja en los miles de millones de euros que estos países han destinado a apoyar el esfuerzo bélico de Ucrania y en las discusiones recientes sobre el despliegue de tropas en el país, bajo la premisa de una misión de paz.
Lavrov no dudó en calificar al gobierno ucraniano de «régimen nazi» y «rusófobo», afirmando que la intervención de Occidente en Ucrania busca debilitar a Rusia. En este sentido, el ministro ruso advirtió que algunos países europeos intentan borrar de la historia su colaboración con los nazis, lo que a su juicio contribuye a la actual situación en Ucrania, donde se rinde homenaje a colaboradores nazis como héroes nacionales.
El ministro concluyó su intervención subrayando la importancia de recordar las lecciones del pasado y advirtiendo sobre las «consecuencias catastróficas» que pueden derivarse de los intentos de derrotar a Rusia. Lavrov expresó su esperanza de que no todos hayan olvidado los valores y raíces históricas que, según él, son fundamentales para evitar repetir los errores del pasado.
