Los hermanos escoceses Ewan, Jamie y Lachlan MacLean han iniciado una ambiciosa travesía desde Perú con el objetivo de establecer un récord en la travesía del Océano Pacífico. A bordo de un bote de fibra de carbono, los tres hermanos han partido de Lima, con la meta de alcanzar Sydney, Australia, a una distancia de 9,000 millas (14,500 kilómetros) en un tiempo estimado de cuatro meses.
Con la experiencia de haber cruzado el Océano Atlántico en 2020, los MacLean buscan además recaudar más de un millón de dólares para financiar proyectos de acceso a agua potable en Madagascar. Durante su travesía, el trío se enfrentará a duras condiciones, incluyendo la falta de sueño, ya que planean realizar turnos de remo de 12 a 14 horas diarias, durmiendo solo de cinco a seis horas cada 24 horas.
“Vamos a remar sin parar y sin apoyo externo, así que estaremos solos”, afirmó Lachlan MacLean en declaraciones a AFP antes de embarcarse. La ceremonia de partida incluyó una actuación del hermano menor, Jamie, quien tocó la gaita acompañado por una banda de la Armada Peruana.
Un compromiso por el agua limpia
El objetivo principal de esta travesía va más allá de establecer un récord; se centra en la recaudación de fondos para su fundación, la MacLean Foundation. “El agua limpia es la necesidad más básica del ser humano en el planeta, pero el 10% de la población mundial no tiene acceso a ella”, señalaron los hermanos en su página web. En Madagascar, solo el 14% de la población rural dispone de acceso a una fuente de agua potable.
Además, los MacLean han destacado la importancia de la conservación marina, afirmando que “mantener nuestros océanos limpios es parte del mismo paquete” en referencia a su compromiso con el medio ambiente. En su travesía anterior, establecieron tres récords mundiales cruzando el Atlántico, sin haber sido remeros profesionales, y lograron recaudar más de 260,000 dólares para causas benéficas.
Los retos que enfrenta este proyecto son significativos, y la perseverancia de los hermanos MacLean no solo busca hacer historia, sino también generar un impacto positivo en las comunidades que carecen de un recurso vital como el agua potable.
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