
Captura histórica del calamar colosal en su hábitat natural
El calamar colosal, considerado el invertebrado más pesado del mundo, ha sido grabado nadando en el océano profundo por primera vez desde su identificación hace un siglo. Este hito se produjo el 9 de marzo, gracias a un equipo internacional de científicos y técnicos que se encontraban en una expedición cerca de las Islas Sandwich del Sur, en el océano Atlántico Sur, según informó el Instituto Schmidt Ocean.
El calamar, conocido científicamente como Mesonychoteuthis hamiltoni, era un juvenil de casi un pie de longitud y fue avistado a una profundidad de 600 metros. La filmación fue realizada desde un vehículo operado de forma remota llamado SuBastian, que fue utilizado por los investigadores a bordo del buque de investigación Falkor. La doctora Kat Bolstad, de la Universidad de Tecnología de Auckland, expresó su entusiasmo por la grabación, destacando que es un momento emocionante poder observar a un calamar colosal en su entorno natural y reflexionando sobre el hecho de que estos seres marinos aún no son conscientes de la existencia humana.
Desde su identificación formal en 1925, el calamar colosal ha sido escasamente documentado en su hábitat. Hasta ahora, su presencia había sido conocida principalmente a través de restos encontrados en los estómagos de ballenas y aves marinas, así como por su papel como depredador de especies como el pez de los dientes. Se estima que estos calamares pueden alcanzar longitudes de hasta 7 metros y pesar hasta 500 kilogramos. Su ciclo de vida sigue siendo un misterio, aunque se sabe que pierden su cuerpo transparente al llegar a la adultez. Es importante destacar que el calamar colosal no debe confundirse con el calamar gigante, ya que pertenecen a familias distintas. Mientras que el calamar gigante tiene tentáculos más largos y un cuerpo más estrecho, el colosal presenta un cuerpo más robusto y tentáculos más cortos.
Hasta la fecha, el vehículo SuBastian ha logrado capturar la primera filmación confirmada de al menos cuatro especies de calamares en su hábitat natural, incluyendo el Promachoteuthis el año pasado y el calamar de cuerno de carnero en 2020. La exploración de estas especies marinas continúa aportando valiosa información sobre la biodiversidad de los océanos y la fascinante vida que habita en sus profundidades.