
Un alto funcionario chino ha criticado con dureza las tarifas impuestas por el presidente de EE. UU., Donald Trump, a Hong Kong, una región administrativa especial de China. Xia Baolong, director de la Oficina de Asuntos de Hong Kong y Macao, calificó estas medidas de «extremadamente arrogantes y vergonzosas» y afirmó que «los campesinos estadounidenses» clamarían ante una civilización china de 5,000 años.
Las declaraciones de Xia se producen en un contexto de creciente tensión entre EE. UU. y China, que se ha intensificado tras los comentarios del vicepresidente J.D. Vance, quien sugirió que EE. UU. se endeuda con «campesinos chinos para comprar cosas que esos campesinos fabrican». Beijing respondió a esta afirmación tildándola de «ignorante y despectiva».
La guerra de tarifas y sus repercusiones
En un discurso televisado, Xia condenó la decisión de Trump de imponer altos aranceles a Hong Kong, a pesar de que esta región representa la mayor fuente del superávit comercial de EE. UU. «No se trata de nuestras tarifas, sino de nuestra propia supervivencia», subrayó Xia, quien advirtió que «la presión, las amenazas y el chantaje no son el camino correcto para tratar con China».
El funcionario chino también hizo hincapié en que las tácticas de intimidación nunca han tenido éxito contra el pueblo chino, incluidos los habitantes de Hong Kong. «Dejen que esos campesinos en EE. UU. clamen ante los 5,000 años de civilización china», añadió Xia, reafirmando la postura de resistencia de su país ante las agresiones externas.
Las tensiones comerciales entre EE. UU. y China se han intensificado en un marco más amplio de campaña estadounidense que afecta a numerosos países. Aunque la mayoría de los aranceles elevados se suspendieron durante 90 días, China fue excluida de esta medida. Actualmente, el total de aranceles sobre los productos chinos ha aumentado hasta un 145%, lo que ha llevado a Beijing a imponer tarifas del 125% sobre las importaciones de productos estadounidenses y a restringir la exportación de minerales esenciales para la fabricación de alta tecnología.
Las declaraciones de Xia y la respuesta del portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian, quien también instó a EE. UU. a abandonar la presión extrema y a optar por el diálogo y la negociación, reflejan la postura firme de China ante lo que considera una agresión comercial injustificada. La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro de las relaciones comerciales entre ambas potencias y las repercusiones que estas tensiones pueden tener en la economía global.