
Un estudio realizado por un equipo de investigadores, en el que participa el científico de la Universidad Texas A&M, ha revelado nuevos datos sobre la historia geológica del cráter Jezero en Marte, lugar de aterrizaje del rover Perseverance de la NASA. Los hallazgos indican que el fondo del cráter está compuesto por una variada serie de rocas volcánicas ricas en hierro, lo que proporciona una visión única del pasado distante del planeta y la oportunidad más cercana de encontrar señales de vida antigua.
El Dr. Michael Tice, investigador que se especializa en geobiología y geología sedimentaria en la Universidad Texas A&M, forma parte de este equipo internacional que explora la superficie marciana. Sus descubrimientos han sido publicados en la revista Science Advances.
Avances tecnológicos en la exploración de Marte
Perseverance, el explorador robótico más avanzado de la NASA, aterrizó en el cráter Jezero el 18 de febrero de 2021, como parte de la misión Mars 2020, cuyo objetivo es buscar signos de vida microbiana antigua en el planeta rojo. El rover está recolectando muestras de núcleos de roca marciana y regolito (roca fragmentada y suelo) para su posible análisis futuro en la Tierra.
Los científicos, como el Dr. Tice, están utilizando las herramientas de alta tecnología del rover para analizar las rocas marcianas y determinar su composición química, así como detectar compuestos que podrían indicar la existencia de vida pasada. Gracias a su sistema de cámaras de alta resolución, Perseverance proporciona imágenes detalladas de la textura y las estructuras de las rocas. Tice señala que la tecnología de este rover es tan avanzada que están obteniendo información a niveles sin precedentes.
«No solo estamos mirando imágenes; estamos obteniendo datos químicos detallados, composiciones minerales e incluso texturas microscópicas», afirma Tice. «Es como tener un laboratorio móvil en otro planeta.»
El equipo de investigación analizó las formaciones rocosas dentro del cráter para comprender mejor la historia volcánica e hidrológica de Marte. Utilizaron el Instrumento Planetario para la Litquimia por Rayos X (PIXL), un espectrómetro avanzado, para examinar la composición química y las texturas de las rocas en la formación Máaz, una área geológica clave dentro del cráter Jezero. Las capacidades de rayos X de alta resolución de PIXL permiten un detalle sin precedentes en el estudio de los elementos presentes en las rocas.
El Dr. Tice destaca la importancia de esta tecnología en la revolución de la exploración marciana. «Cada rover que ha ido a Marte ha sido una maravilla tecnológica, pero esta es la primera vez que hemos podido analizar rocas con tal alta resolución utilizando fluorescencia de rayos X. Ha cambiado completamente nuestra forma de pensar sobre la historia de las rocas en Marte», comentó.
Revelaciones sobre la historia volcánica de Marte
El análisis del equipo reveló dos tipos distintos de rocas volcánicas. El primer tipo, de tonalidad oscura y rico en hierro y magnesio, contiene minerales entrelazados como piroxeno y feldespato plagioclasa, con evidencias de olivino alterado. El segundo tipo, una roca de tonalidad más clara clasificada como trachy-andesita, incluye cristales de feldespato plagioclasa en una matriz rica en potasio. Estos hallazgos indican una historia volcánica compleja que involucra múltiples flujos de lava con composiciones variadas.
Para determinar cómo se formaron estas rocas, los investigadores llevaron a cabo modelados termodinámicos, un método que simula las condiciones bajo las cuales los minerales se solidificaron. Los resultados sugieren que las composiciones únicas son el resultado de una cristalización fraccionada de alto grado, un proceso en el que diferentes minerales se separan de la roca fundida a medida que se enfría. Además, encontraron indicios de que la lava podría haber mezclado con material rico en hierro de la corteza de Marte, alterando aún más la composición de las rocas.
Estos procesos que se observan en Marte, como la cristalización fraccionada y la asimilación de la corteza, son comunes en sistemas volcánicos activos en la Tierra. Esto sugiere que esta parte de Marte pudo haber tenido actividad volcánica prolongada, la cual podría haber proporcionado una fuente constante de diferentes compuestos necesarios para la vida.
La importancia de este descubrimiento radica en su contribución a la comprensión de la habitabilidad de Marte. Si Marte tuvo un sistema volcánico activo durante un periodo prolongado, podría haber mantenido condiciones adecuadas para la vida en gran parte de su historia temprana.
«Hemos seleccionado cuidadosamente estas rocas porque contienen pistas sobre los antiguos entornos de Marte», indicó Tice. «Cuando logremos traerlas de vuelta a la Tierra y analizarlas con instrumentos de laboratorio, podremos plantear preguntas mucho más detalladas sobre su historia y posibles firmas biológicas.»
La misión de retorno de muestras de Marte, un esfuerzo colaborativo entre la NASA y la Agencia Espacial Europea, tiene como objetivo traer estas muestras de vuelta dentro de la próxima década. Una vez en la Tierra, los científicos tendrán acceso a técnicas de laboratorio más avanzadas para analizarlas en mayor detalle.
El Dr. Tice concluyó afirmando que, dada la asombrosa tecnología del Perseverance, se esperan más descubrimientos en el futuro. «Algunos de los trabajos más emocionantes aún están por venir. Este estudio es solo el comienzo. Estamos viendo cosas que nunca esperábamos, y creo que en los próximos años podremos refinar nuestra comprensión de la historia geológica de Marte de maneras que nunca imaginamos».