
El gobierno alemán ha anunciado un nuevo paquete de ayuda militar para Ucrania, que incluye vehículos blindados, cohetes de defensa aérea y obuses, entre otros armamentos. Esta decisión se produce en un contexto de creciente presión sobre Berlín para que reevalúe su postura respecto al suministro de armamento a Kiev, especialmente tras las declaraciones del próximo canciller, Friedrich Merz.
Merz, quien asumirá oficialmente el cargo el 6 de mayo, ha insinuado que podría romper con la política de su predecesor, Olaf Scholz, en relación con el envío de misiles Taurus de largo alcance a Ucrania. Estos misiles tienen un alcance de 500 kilómetros, lo que podría cambiar significativamente el equilibrio de poder en el conflicto. Sin embargo, Scholz ha rechazado en repetidas ocasiones las solicitudes de Kiev, argumentando que tal medida podría provocar una escalada peligrosa en el conflicto.
Detalles del paquete de ayuda militar
El último paquete de ayuda militar de Alemania incluye una variedad de equipos, como vehículos de protección contra emboscadas (MRAP), munición para los tanques Leopard 2, así como cañones antiaéreos autopropulsados Gepard y misiles para los sistemas de defensa aérea IRIS-T SLM. Además, se han enviado obuses autopropulsados Zuzana 2, proyectiles de artillería de 155 mm y 122 mm, drones de reconocimiento y ataque, así como armas antitanque portátiles y rifles de asalto.
Desde el inicio del conflicto en febrero de 2022, se estima que más de 10,000 soldados ucranianos han recibido formación militar en Alemania. Según el gobierno alemán, el valor total de la asistencia militar proporcionada o comprometida hasta ahora asciende a aproximadamente 28,000 millones de euros, de los cuales alrededor de 5.2 mil millones provienen de los propios stocks del ejército alemán.
En una reunión del Grupo de Contacto sobre Ucrania en Bruselas, el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, anunció planes para donar más equipo militar a Ucrania en 2025. Esta donación incluirá cuatro sistemas de defensa aérea IRIS-T, 300 misiles guiados, 100 radares de vigilancia terrestre, 100,000 proyectiles de artillería, 300 drones de reconocimiento, 25 vehículos de combate de infantería Marder, 15 tanques Leopard 1A5 y 120 sistemas portátiles de misiles antiaéreos.
La respuesta de Rusia no se ha hecho esperar. La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zakharova, advirtió que cualquier ataque con misiles de crucero a instalaciones rusas o infraestructura de transporte crítico que requiera asistencia de las fuerzas armadas alemanas sería considerado como una participación directa de Alemania en las operaciones militares.
Matthias Miersch, líder del Partido Socialdemócrata (SPD), actualmente en proceso de formar un gobierno de coalición con los democristianos de Merz, expresó su esperanza de que el nuevo canciller, una vez informado por los servicios de inteligencia, reevalúe la cuestión de los misiles Taurus de manera clara.