Un evento astronómico único: la ocultación estelar de Urano
Este mes, los investigadores de la NASA tuvieron la oportunidad de estudiar la atmósfera y los anillos de Urano durante un evento raro conocido como ocultación estelar. Este fenómeno ocurrió cuando el gigante helado pasó entre la Tierra y una estrella distante, provocando que esta última desapareciera momentáneamente de la vista. La ocultación, que tuvo lugar el 7 de abril y solo fue visible desde el oeste de América del Norte, tuvo un impacto significativo en la recolección de datos astronómicos, ya que la última vez que se observó un evento similar fue en 1996.
Un equipo internacional de más de 30 astrónomos, liderado por científicos planetarios del Centro de Investigación Langley de la NASA en Virginia, utilizó 18 observatorios para recopilar información durante este fenómeno. William Saunders, un científico planetario del Langley, destacó la magnitud de esta colaboración, afirmando que nunca antes se había trabajado a tal escala en una ocultación estelar. Gracias a la observación desde múltiples telescopios, los científicos lograron medir la curva de luz y determinar las propiedades atmosféricas de Urano en diferentes capas de altitud.
Los datos obtenidos permitieron a los investigadores evaluar la temperatura y la composición de la estratósfera de Urano, la capa intermedia de su atmósfera. Este análisis resulta especialmente relevante, ya que ofrece comparaciones con las observaciones realizadas en 1996, proporcionando así una visión de cómo ha cambiado la atmósfera del planeta en el transcurso de los años. Los funcionarios de la NASA afirmaron que esta información podría facilitar futuros esfuerzos de exploración de Urano, que se encuentra actualmente a unos 3.2 mil millones de kilómetros de la Tierra y carece de una superficie sólida, caracterizándose más bien por una mezcla de agua, amoníaco y metano.
