
La NASA está avanzando rápidamente hacia el lanzamiento de Artemis II, su primera misión tripulada dentro del programa Artemis, que tiene como objetivo llevar a astronautas alrededor de la Luna el próximo año. En el Centro Espacial Kennedy de Florida, ingenieros y técnicos trabajan sin descanso en la integración y las pruebas finales de todos los elementos del Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) y la nave Orion. Recientemente, se han logrado dos hitos clave: la conexión de la etapa superior del SLS con el resto del cohete ensamblado y el traslado de la nave Orion a un área de combustible para su vuelo.
Según Lakiesha Hawkins, asistente del administrador adjunto del programa lunar de la NASA, «estamos extremadamente enfocados en la preparación para Artemis II, y la misión está casi aquí». Este vuelo de prueba tripulado, que enviará a cuatro humanos alrededor de la Luna, servirá para informar sobre las futuras misiones hacia la Luna y Marte.

El 1 de mayo, los técnicos lograron adjuntar la etapa de propulsión criogénica interina a los elementos del cohete SLS, que ya estaban preparados sobre el lanzador móvil 1, incluyendo sus impulsores sólidos y el núcleo del cohete. Esta parte del cohete produce 24,750 libras de empuje para Orion después de que el resto del cohete haya cumplido su función. En las próximas semanas, los equipos llevarán a cabo una serie de pruebas integradas para asegurar que todos los elementos del cohete se comuniquen adecuadamente entre sí y con el Centro de Control de Lanzamiento.
El 3 de mayo, la nave Orion dejó su ubicación original en el Centro de Operaciones y Verificación Neil Armstrong, donde se ensambló y se sometió a pruebas iniciales. Allí, el módulo de la tripulación fue equipado con miles de piezas, incluyendo sistemas de soporte vital críticos para el vuelo, y se integró con el módulo de servicio y el adaptador del módulo de la tripulación.

El siguiente paso para la nave Orion es el Multi-Payload Processing Facility, donde se le añadirá combustible y otros fluidos necesarios para la misión. Posteriormente, los cuatro astronautas que formarán parte de la misión, a saber, Reid Wiseman, Victor Glover, Christina Koch y el astronauta de la Agencia Espacial Canadiense, Jeremy Hansen, abordarán la nave para probar todas las interfaces de equipo que necesitarán durante la misión. Este será el primer momento en que los astronautas se subirán a su nave real vistiendo sus trajes espaciales.
Una vez completadas las pruebas con la tripulación, la nave Orion será trasladada a la instalación del Sistema de Abortaje de Lanzamiento, donde se añadirá el sistema de escape crítico. Desde allí, Orion se moverá al VAB para ser integrada con el cohete completamente ensamblado.

El equipo de lanzamiento en Kennedy ha completado más de 30 simulaciones que abarcan desde la carga de propulsores criogénicos hasta escenarios de cuenta regresiva terminal. La tripulación ha participado en simulaciones para diversos escenarios de misión, incluyendo pruebas de pilotaje manual. En abril, la tripulación y el equipo de control de vuelo de la NASA en el Centro Espacial Johnson en Houston simularon el despegue por primera vez. Además, se realizaron comprobaciones de ajuste a largo plazo para los trajes espaciales y los asientos, practicando varias operaciones bajo diferentes presiones de traje.
A medida que se acercan los meses de verano, la preparación para la misión se intensificará. Mientras continúan las verificaciones de hardware y la integración, la tripulación, los controladores de vuelo y los controladores de lanzamiento comenzarán a practicar sus roles en la misión en simulaciones integradas. En mayo, la tripulación participará en operaciones previas al lanzamiento y entrenamiento para escenarios de emergencia durante las operaciones de lanzamiento en Kennedy.
La NASA también ha anunciado su segundo acuerdo con una agencia espacial internacional para volar un CubeSat en la misión. Estas colaboraciones brindan oportunidades para que otros países trabajen junto a la NASA para integrar y volar tecnología y experimentos como parte de la campaña Artemis.
A través de Artemis, la NASA enviará astronautas para explorar la Luna con el fin de realizar descubrimientos científicos, obtener beneficios económicos y construir la base para las primeras misiones tripuladas a Marte.