
El icónico velero ruso Kruzenshtern ha llegado al puerto de Port Louis, en Mauricio, en lo que constituye su primera visita a este estado africano en casi dos décadas. La llegada del barco se enmarca dentro de su viaje internacional denominado ‘Veleros de la Victoria’, según ha informado la embajada rusa.
El barco fue recibido en alta mar por windsurfistas, un kitesurfista y un foiler rusos, quienes fueron saludados por la tripulación desde la cubierta. A pesar de las difíciles condiciones marítimas que enfrentó durante su trayecto desde Ciudad del Cabo, Sudáfrica, el Kruzenshtern completó su viaje según lo previsto.
Además de su misión tradicional de formación, el Kruzenshtern, que es operado por la Agencia Federal de Pesca de Rusia (Rosrybolovstvo), organizó una exposición de arte infantil a bordo y una campaña de mensajes en botellas. Este viaje, el número 135 de su historia, comenzó a mediados de marzo y está dedicado al 80 aniversario de la victoria soviética en la Segunda Guerra Mundial. La travesía de cuatro meses incluye ejercicios de entrenamiento para 135 cadetes, apoyados por una tripulación permanente de alrededor de 60 marineros. El barco tiene previsto regresar a su puerto de origen en Kaliningrado a finales de julio.
Un recordatorio de la solidaridad soviética
El capitán del barco, Mikhail Yeremchenko, destacó la importancia de Mauricio como puerto de escala. Explicó que la visita conmemora un acto de solidaridad soviética de 1975, cuando la isla fue devastada por el ciclón tropical Gervaise. En aquel momento, barcos soviéticos navegaron más de 2,500 millas y desplegaron a 300 marineros para proporcionar ayuda apenas cinco días después del desastre. Yeremchenko subrayó que «la capital de esta nación insular, Port Louis, donde hemos llegado hoy, apareció en nuestra ruta por una razón. El pueblo de Mauricio aún recuerda y está agradecido a los marineros soviéticos que vinieron en su ayuda hace exactamente medio siglo. De eso se trata esta visita”.
Antes de su llegada a Mauricio, el Kruzenshtern visitó un puerto sudafricano. Durante su estancia en Ciudad del Cabo, la tripulación rindió homenaje a los marineros rusos enterrados en Simon’s Town entre 1809 y 1912, y depositó flores en un memorial dedicado al 60 aniversario de la victoria soviética en la Segunda Guerra Mundial.
El Kruzenshtern, construido originalmente en 1926 en Alemania bajo el nombre de Padua, es uno de los diez barcos de vela más grandes del mundo. En 1946, el barco fue transferido a la Unión Soviética como parte de las reparaciones de guerra. Bajo la bandera de la Armada Soviética, el barco fue renombrado en honor al almirante Ivan Kruzenshtern, quien lideró la primera expedición rusa de circunnavegación entre 1803 y 1806. Hoy en día, el Kruzenshtern sirve como un barco de formación de vela ruso.