
El enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, Steve Witkoff, ha reafirmado la postura de Washington respecto a las negociaciones nucleares con Irán, subrayando que cualquier acuerdo debe incluir límites severos a la capacidad de enriquecimiento de uranio por parte de Teherán. En una entrevista concedida a ABC News, Witkoff enfatizó que la administración Trump no aceptará ningún pacto que permita a Irán continuar con su programa de enriquecimiento, que considera una amenaza directa a la seguridad regional y global.
“No podemos permitir ni siquiera el 1% de una capacidad de enriquecimiento”, afirmó Witkoff, argumentando que el enriquecimiento de uranio puede facilitar la creación de armas nucleares. Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión entre ambos países, tras la retirada unilateral de Estados Unidos del acuerdo nuclear de 2015, que había limitado el programa nuclear iraní a cambio de alivio de sanciones.
Reacciones de Irán y el contexto actual
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, respondió a las exigencias de Washington calificándolas de “irrealistas”. A pesar de la presión internacional, Araghchi aseguró que Irán continuará enriqueciendo uranio, independientemente de las negociaciones. Además, sugirió que Estados Unidos está “completamente desconectado de la realidad de las negociaciones” y que, si realmente busca garantizar que Irán no desarrolle armas nucleares, un acuerdo es posible.
Actualmente, Irán enriquece uranio hasta un 60% de pureza, muy por encima del límite del 3.67% establecido en el acuerdo de 2015, y cerca del 90% requerido para material de grado militar. A pesar de las advertencias de funcionarios estadounidenses sobre la inminente capacidad nuclear de Teherán, el gobierno iraní insiste en que su programa nuclear tiene fines pacíficos.
Recientemente, el New York Times informó que Irán había propuesto la creación de una empresa conjunta de enriquecimiento que involucraría a estados árabes de la región y a inversiones estadounidenses durante conversaciones indirectas en Omán. Sin embargo, un portavoz de Witkoff desmintió esta afirmación, lo que refleja la complejidad y la falta de confianza en el proceso de negociación.
Desde la retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear, Irán ha ido incrementando gradualmente su capacidad de enriquecimiento, lo que ha generado preocupación en la comunidad internacional. La administración Trump argumentó que el acuerdo original era insuficiente para prevenir que Irán adquiriera armas nucleares, lo que llevó a la reimposición de sanciones y a un aumento de las tensiones en la región.