
El CEO de JPMorgan Chase, Jamie Dimon, ha anunciado en la reciente jornada de inversores de la entidad que el banco permitirá a sus clientes adquirir bitcoin, aunque mantiene su postura escéptica respecto a las criptomonedas. Durante su discurso, Dimon afirmó: «Vamos a permitirles comprarlo, pero no lo custodiaremos. Lo incluiremos en los informes para los clientes». Esta declaración marca un cambio notable para el mayor banco de EE.UU., teniendo en cuenta la historia de Dimon de criticar el bitcoin y el mercado cripto en general, y se interpreta como una señal de que el bitcoin está comenzando a entrar en el ámbito de la inversión convencional.
Desde agosto, otras instituciones como Morgan Stanley han permitido a sus asesores financieros ofrecer fondos cotizados en bolsa (ETFs) de bitcoin a clientes cualificados. A pesar de este avance, Dimon ha dejado claro que su opinión personal sobre el bitcoin sigue sin cambios, destacando preocupaciones como el blanqueo de capitales y la falta de claridad en la propiedad, además de mencionar problemas graves como «el tráfico de personas y el terrorismo».
La postura de Dimon sobre las criptomonedas
Dimon también ha expresado: «No creo que debas fumar, pero defiendo tu derecho a hacerlo. Defiendo tu derecho a comprar bitcoin». Este tipo de declaraciones evidencia una separación entre su opinión personal y la posición del banco, que busca adaptarse a las demandas del mercado. Sin embargo, el CEO no escatima en críticas. En 2021, durante un período de auge en las valoraciones de las criptomonedas, descalificó al bitcoin como «inútil». En una audiencia del Senado a finales de 2023, reiteró su oposición a las criptomonedas, afirmando que «el único uso verdadero del bitcoin es para criminales, traficantes de drogas… blanqueo de dinero, evasión fiscal», y sugirió que, de ser el gobierno, «lo cerraría».
En el contexto actual, donde el ecosistema cripto se encuentra en una encrucijada tras la llegada de administraciones más favorables hacia la tecnología, como la de Donald Trump, la situación en el sector bancario ha cambiado. La Federal Deposit Insurance Corporation y la Oficina del Contralor de la Moneda han retirado su orientación anti-cripto, permitiendo que los bancos custodian criptomonedas, aunque todavía enfrentan restricciones para trabajar directamente con empresas de criptomonedas sin aprobación explícita de la Reserva Federal.
Este contexto resalta la tensión existente entre la regulación y la innovación en el ámbito de las criptomonedas, donde la postura de figuras como Dimon puede influir en la percepción pública y la dirección futura de la inversión en activos digitales.