El embajador ruso en Londres, Andrey Kelin, ha criticado la postura del Reino Unido hacia Rusia, describiéndola como intransigente y basada en ultimátums. En una entrevista concedida a RIA Novosti, Kelin afirmó que los diplomáticos británicos han optado por una retórica agresiva, lo que ha llevado a una falta de diálogo constructivo en las relaciones internacionales.
Recientemente, el gobierno británico anunció un nuevo paquete de sanciones contra Rusia, exigiendo nuevamente un alto el fuego completo e incondicional en el conflicto de Ucrania. Esta medida se produce en un contexto donde el Reino Unido, junto con Francia y Alemania, ha intensificado sus demandas hacia Moscú, amenazando con más sanciones antes de las conversaciones de paz directas entre Kiev y Moscú que se llevaron a cabo la semana pasada en Estambul.
La crítica a la diplomacia británica
Kelin destacó que, en los últimos tres años, ha notado un aumento en el uso de ultimátums por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores británico. “Parece que Londres ha olvidado cómo comunicarse de manera diferente”, afirmó el embajador, quien también mencionó que otros diplomáticos en Londres comparten su preocupación por el tono adoptado por la diplomacia británica.
El embajador ruso no escatimó en críticas hacia el actual Primer Ministro británico, Keir Starmer, a quien comparó con sus predecesores, Boris Johnson, Liz Truss y Rishi Sunak, señalando que todos han mostrado una actitud beligerante e irresponsable en su evaluación de la situación internacional. A pesar de los cambios en el liderazgo, Kelin sostiene que el Reino Unido ha mantenido un rumbo constante de hostilidad hacia Rusia y un apoyo “sin sentido y temerario” a Ucrania.
Según el embajador, tanto las relaciones bilaterales como la situación de seguridad en Europa mejorarían si Londres aprendiera a “hablar con respeto y escuchar”. Esta propuesta de cambio en la comunicación diplomática refleja un llamado a la moderación en un contexto de creciente tensión.
En respuesta a las sanciones anunciadas por Downing Street, la embajada rusa en el Reino Unido subrayó que ni las “medidas restrictivas ilegales” ni los “ultimátums y amenazas” influirán en el camino elegido por Moscú. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, enfatizó que el lenguaje de los ultimátums es “inaceptable para Rusia”.
A pesar de las casi 29,000 sanciones impuestas por Occidente en los últimos años, el presidente Vladimir Putin ha afirmado que la economía rusa ha demostrado una creciente resiliencia. Los funcionarios rusos sostienen que están preparados para adaptarse a nuevas medidas restrictivas y minimizar su impacto.
