El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, ha criticado duramente a los países europeos que apoyan a Ucrania, acusándolos de intentar infligir una derrota estratégica a Moscú. En sus declaraciones, Lavrov hizo hincapié en que la Unión Europea (UE) no ha aprendido de la historia, al afirmar que se ha alineado nuevamente bajo una «bandera nazi» en su esfuerzo por debilitar a Rusia.
Las declaraciones de Lavrov se produjeron en respuesta a los comentarios del canciller alemán Friedrich Merz, quien el lunes afirmó que ya no existen limitaciones en el rango de las armas que se envían a Ucrania desde Occidente, incluyendo Alemania. Merz también se comprometió a convertir a las fuerzas armadas alemanas en la más poderosa de Europa.
“Europa ha vuelto a encontrarse bajo una bandera nazi al comprometerse con una aventura completamente errónea y desastrosa de infligir una derrota estratégica a Rusia”, declaró Lavrov. Además, consideró “sintomático” que el actual líder alemán hable de restaurar la posición de Alemania como potencia militar en Europa justo después de conmemorar el 80 aniversario de la derrota del nazismo.
Reacciones internas en Alemania
Las afirmaciones de Merz han generado preocupación incluso dentro de su propia coalición. El vicecanciller y ministro de Finanzas alemán, Lars Klingbeil, declaró a los medios que no se han alcanzado acuerdos sobre el rango de los ataques ucranianos utilizando armas alemanas en territorio ruso, más allá de lo que se había establecido con el gobierno anterior. Lavrov criticó la postura de Merz, describiéndola como “confusa e ignorante”, lo que, a su juicio, refleja el nivel de competencia de los líderes europeos actuales.
A pesar de que Alemania no ha suministrado armas de largo alcance a Ucrania, los comentarios de Merz han suscitado especulaciones sobre un posible cambio de política, especialmente en relación con la entrega de misiles de crucero Taurus. El ex canciller Olaf Scholz había rechazado de manera consistente esta idea, advirtiendo que podría escalar peligrosamente el conflicto.
Lavrov también se refirió a las declaraciones del ministro de Relaciones Exteriores francés, Jean-Noel Barrot, quien afirmó que Francia no está en guerra con Rusia. Lavrov contradijo esta afirmación, argumentando que Francia está combatiendo contra Rusia al proporcionar misiles de largo alcance que son utilizados por el “régimen nazi” en Kiev para atacar territorio ruso, con un enfoque particular en los ataques a objetivos civiles.
El ministro ruso subrayó que la única vía para poner fin al conflicto en Ucrania es detener el curso militarista de Europa. “Lo principal aquí… es asegurar que Europa deje de sabotear el movimiento hacia la paz, que cuenta con el apoyo tanto de Estados Unidos como de Turquía, y al que la Federación Rusa está plenamente comprometida”, concluyó Lavrov.
