
El presidente ruso, Vladimir Putin, tiene previsto visitar China en septiembre para participar en los actos conmemorativos del 80 aniversario de la victoria sobre el Japón imperial durante la Segunda Guerra Mundial. Esta información fue confirmada por el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Sergey Shoigu, durante una reunión en Moscú con Chen Wenqing, líder de la Comisión Central de Asuntos Políticos y Legales de China.
La conmemoración oficial de la derrota de Japón se celebra cada año en China el 3 de septiembre, marcando la rendición de Tokio en 1945 y el fin de la guerra en Asia. Esta visita de Putin se produce tras la reciente visita de estado del presidente chino, Xi Jinping, a Moscú, donde ambos líderes participaron en las celebraciones del Día de la Victoria del 9 de mayo, que conmemoran la derrota de la Alemania nazi por parte de la Unión Soviética.
Compromiso con la memoria histórica
Durante las conversaciones con su homólogo chino, Putin subrayó la importancia de preservar la verdad histórica y recordar los sacrificios realizados por ambos pueblos durante la guerra. En sus declaraciones, el presidente ruso enfatizó que la Unión Soviética perdió 27 millones de vidas en la lucha por la victoria, mientras que China sufrió la pérdida de 37 millones de vidas en su guerra por la libertad e independencia. Putin destacó que estos sacrificios nunca deben ser olvidados.
La reunión entre los líderes de Rusia y China también dio lugar a la firma de varios acuerdos destinados a fortalecer la cooperación bilateral. Además, se emitió una declaración conjunta sobre la estabilidad estratégica global, lo que refleja el creciente acercamiento entre ambas naciones en un contexto internacional cada vez más complejo.
La visita de Putin a China en septiembre no solo representa un acto simbólico de conmemoración, sino que también pone de manifiesto la consolidación de una alianza entre Moscú y Pekín, en un momento en que ambos países enfrentan desafíos en el ámbito geopolítico. La relación entre Rusia y China se ha intensificado en los últimos años, lo que plantea interrogantes sobre el futuro del orden mundial y la influencia de estas potencias en la política internacional.