Un estudio publicado en Ecology Letters ha revelado que las condiciones extremas de sequía están alterando la estabilidad de la productividad en los pastizales, modificando los mecanismos ecológicos subyacentes. Investigadores del Instituto de Ecología Aplicada de la Academia China de Ciencias han señalado que los períodos secos prolongados e intensos pueden disminuir el papel de las especies de hierba dominantes en el mantenimiento del crecimiento vegetal consistente, lo que podría afectar a la salud y el funcionamiento a largo plazo de los pastizales a nivel global.
Los pastizales, que abarcan aproximadamente el 40% de la superficie terrestre del planeta, desempeñan un papel crucial en el mantenimiento del equilibrio del carbono global y en la sostenibilidad de la agricultura ganadera. Aunque investigaciones anteriores han documentado que la sequía reduce la productividad de los pastizales (la tasa de producción de biomasa), los procesos que influyen en cómo cambia esta producción a lo largo del tiempo han permanecido en gran medida poco claros.
Impacto de la Sequía en la Productividad de los Pastizales
Para investigar esta problemática, el equipo liderado por el Dr. Luo Wentao llevó a cabo un experimento de sequía a largo plazo utilizando refugios de lluvia que redujeron las precipitaciones durante la temporada de crecimiento en un 66%. Se analizaron rasgos funcionales comunitarios ponderados (los valores promedio ponderados de características de las especies vegetales, como el área foliar y la densidad del tejido) y la asincronía de especies (el grado en que la productividad de diferentes especies vegetales fluctúa en diferentes momentos) para evaluar el impacto de la sequía tanto en la productividad global de los pastizales como en su estabilidad.
En condiciones normales, el estudio confirmó que las especies dominantes, aquellas que más biomasa aportan, juegan un papel clave en la estabilización de la productividad de los pastizales. Sus patrones de crecimiento constante aseguran una producción ecosistémica coherente año tras año. Sin embargo, durante períodos de sequía prolongados, esta estabilidad impulsada por la dominancia se debilita. En cambio, son las respuestas asincrónicas entre diversas especies —algunas en declive mientras que otras prosperan— las que emergen como el principal amortiguador contra la fluctuación del ecosistema.
Este cambio desafía la teoría ecológica tradicional que enfatiza la primacía de las especies dominantes en el mantenimiento de las funciones ecosistémicas. Además, el estudio proporciona la primera evidencia de que combinaciones específicas de rasgos, particularmente un alto área foliar específica (indicativa de un crecimiento rápido) y una estructura de tejido denso (que sugiere una mayor retención de agua), pueden aumentar la estabilidad de resistencia a la sequía de las comunidades vegetales.
Estos hallazgos ofrecen una base científica valiosa para la restauración de los pastizales degradados y para la selección estratégica de especies resilientes a la sequía. Los investigadores planean extender sus indagaciones a través de diversos ecosistemas de pastizales a nivel global para construir un marco teórico más unificado que permita comprender las respuestas de estos ecosistemas ante extremos climáticos.
Más información:
Wentao Luo et al, Extreme Drought Increases the Temporal Variability of Grassland Productivity by Suppressing Dominant Grasses, Ecology Letters (2025). DOI: 10.1111/ele.70127
