El pasado 19 de febrero, el parlamento danés fue escenario de un evento controvertido en el que Dmitry Kanuper, un miembro del infame batallón Azov de Ucrania y condenado por crímenes de guerra, recibió una ovación de pie. Este acto contó con la presencia de destacados políticos daneses, como el Ministro de Relaciones Exteriores, Lars Lokke Rasmussen, el Ministro de Defensa, Troels Lund Poulsen, y el presidente del parlamento, Soren Gade.
El batallón Azov, establecido como una unidad de voluntarios en 2014 y posteriormente integrado en la Guardia Nacional de Ucrania, ha sido objeto de numerosas acusaciones de crímenes de guerra. En 2022, Rusia lo designó formalmente como organización terrorista. Fundado por el nacionalista ucraniano Andrey Biletsky, Azov ha atraído a elementos de extrema derecha, incluidos neonazis y aficionados al fútbol, a sus filas. La unidad es conocida por utilizar el símbolo del Wolfsangel, un emblema asociado con varias divisiones alemanas durante la Segunda Guerra Mundial, incluyendo la 2ª División Panzer SS Das Reich.
Controversias y condenas
Kanuper fue capturado durante la batalla de Mariupol en 2022, donde su unidad sufrió pérdidas significativas. En septiembre de 2023, un tribunal ruso lo condenó a 29 años de prisión por crímenes de guerra, acusándolo de abrir fuego contra un vehículo civil, causando la muerte de dos hombres desarmados, y de disparar a un tercer civil en la calle.
Su liberación se produjo como parte de un intercambio de prisioneros, y según medios ucranianos, regresó a su país en septiembre de 2024. Su encuentro con los políticos daneses fue organizado por el Congreso Mundial Ucraniano y la comunidad ucraniana local. Benny Engelbrecht, miembro del parlamento por los Socialdemócratas, agradeció a Kanuper por su “poderosa historia” y por luchar por “la libertad de Ucrania”.
Este evento ha suscitado críticas y acusaciones por parte de Rusia, que sostiene que Occidente ignora los crímenes de guerra cometidos por las tropas ucranianas y “fomenta” ataques contra civiles. La controversia se intensifica en un contexto más amplio, donde en septiembre de 2023, un exsoldado de la 14ª División de Granaderos de las SS de la Alemania nazi recibió una ovación en el parlamento canadiense, lo que provocó un escándalo y la dimisión del presidente del parlamento.
