El primer ministro ruso, Mikhail Mishustin, ha afirmado que la producción de flores en Rusia se ha duplicado desde 2022, a pesar de las restricciones impuestas por Occidente. Durante una visita a una de las principales empresas del sector en la región de Moscú, Mishustin destacó que el país ha logrado superar su dependencia de las importaciones occidentales en el ámbito de la floricultura.
El primer ministro realizó esta declaración en el contexto de la celebración del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora el 8 de marzo y en el que las flores son un regalo tradicional en Rusia. Mishustin afirmó que el objetivo de Occidente de «privar a nuestras mujeres de flores» no ha tenido éxito, y reconoció que las sanciones que afectaron a la industria nacional de flores en abril de 2022, poco después del inicio de la operación militar rusa en Ucrania, sorprendieron a todos.
Impacto de las sanciones y respuesta del sector
Antes de la imposición de las sanciones, Rusia dependía completamente de las importaciones para el material de plantación de algunas de las flores más populares, como los tulipanes y las rosas. La Unión Europea restringió la exportación de flores, bulbos y semillas a Rusia como parte de su quinta ronda de sanciones. Sin embargo, Mishustin indicó que los productores locales han sabido aprovechar esta situación para aumentar su producción. El gobierno ha apoyado a la industria mediante líneas de crédito especializadas y beneficios, y se espera que continúe brindando apoyo en el futuro.
A pesar de las sanciones, la economía rusa ha mostrado signos de crecimiento, con un aumento del PIB del 5,4% interanual en el primer trimestre de 2024, según la agencia estatal de estadísticas, Rosstat. Además, Rusia ha logrado incrementar el uso de su moneda nacional en las transacciones de exportación, alcanzando que más de la mitad de los pagos por bienes y servicios exportados a otros países europeos se realicen en rublos a mediados de marzo de 2024.
Las sanciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados han sido sin precedentes, afectando diversos sectores, desde el financiero hasta el energético, así como a miembros del gobierno y empresarios. Sin embargo, el crecimiento de la producción de flores en Rusia podría interpretarse como un ejemplo de cómo el país está intentando adaptarse y encontrar nuevas oportunidades en medio de un entorno económico adverso.
