Un reciente informe elaborado por investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Michigan ha revelado que los estudiantes afroamericanos en Universidades Históricamente Negras (HBCUs) y en Instituciones Predominantemente Negras (PBIs) presentan mejores resultados en salud mental en comparación con sus compañeros en otras instituciones. Sin embargo, este grupo también enfrenta desafíos específicos que requieren atención, según indica el estudio titulado «Comunidad, Cultura y Cuidado: Un Análisis Interinstitucional de la Salud Mental entre Estudiantes de HBCU y PBI».
El estudio, realizado en colaboración con el Instituto para el Desarrollo de Capacidades de la United Negro College Fund, el Steve Fund y la Healthy Minds Network, se basa en datos recabados desde 2007 a través de la Healthy Minds Study, una encuesta anual sobre la salud mental de los estudiantes universitarios. Más de 850,000 estudiantes de más de 600 universidades han participado en esta investigación, que involucra a instituciones como la Universidad de California-Los Ángeles, la Universidad de Wayne State y la Universidad de Boston.
Resultados destacados del estudio
El análisis de las respuestas de 2,504 estudiantes de 16 HBCUs y dos PBIs ha puesto de manifiesto diferencias significativas en varios indicadores de salud mental en comparación con promedios nacionales:
- El 45% de los estudiantes de HBCU/PBI se sienten mentalmente florecientes, frente al 36% de los estudiantes universitarios a nivel nacional.
- El 83% reporta un sentido de pertenencia en su comunidad educativa, comparado con el 73% a nivel nacional.
- Los estudiantes de HBCU/PBI exhiben tasas significativamente más bajas de ansiedad, trastornos alimentarios y uso de sustancias en comparación con los promedios nacionales.
El informe también destaca que, en comparación con estudiantes afroamericanos en instituciones predominantemente blancas, los estudiantes de HBCUs y PBIs generalmente reportan un mejor bienestar mental.
A pesar de estos resultados positivos, el informe revela preocupantes desafíos. Las preocupaciones financieras se identifican como la principal fuente de estrés, con más de la mitad de los estudiantes señalando que su situación económica es «siempre» o «a menudo» estresante. Entre aquellos que experimentan estrés financiero, el 78% reporta problemas de salud mental, en contraste con el 26% de los que se consideran financieramente seguros. Además, más de una cuarta parte de los estudiantes con altos niveles de estrés financiero ha reportado ideación suicida en el último año.
El informe también señala una importante brecha en el apoyo a la salud mental, ya que el 54% de los estudiantes de HBCU reportan necesidades de salud mental no atendidas, una cifra notablemente superior al promedio nacional del 41%.
Con base en estos hallazgos, el informe propone varias oportunidades para que los centros educativos mejoren el apoyo a sus estudiantes, tales como:
- Abordar la alta tasa de necesidades de salud mental no atendidas.
- Desarrollar estrategias para aliviar el estrés financiero.
- Expandir los recursos de salud mental en el campus.
- Fortalecer las conexiones entre estudiantes y el apoyo docente.
Justin Heinze, co-investigador principal de la Healthy Minds Network y profesor asociado en la Universidad de Michigan, subraya que las voces de los estudiantes de HBCUs y otras PBIs han estado históricamente subrepresentadas en la investigación sobre salud mental. «Los hallazgos de este estudio indican diferencias importantes respecto a nuestra muestra nacional, lo que demuestra que no podemos aplicar un enfoque único para abordar la salud mental de los estudiantes universitarios», concluye.
