Vacunas contra la gripe aviar: un posible alivio para la industria avícola estadounidense
La gripe aviar continúa siendo una grave amenaza para la industria avícola en Estados Unidos, con la posibilidad de que las vacunas sean una herramienta clave para su control. Desde 2022, más de 166 millones de aves han sido sacrificadas debido a infecciones, principalmente gallinas ponedoras. Esta situación ha llevado a un aumento significativo en los precios de los huevos, que han alcanzado un promedio de casi 6 dólares por docena. A pesar de la urgencia de implementar un programa de vacunación, su avance se ha visto obstaculizado por temores sobre el impacto en las exportaciones de carne de pollo, que representan un negocio multimillonario.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos ha anunciado planes para destinar 100 millones de dólares al estudio de vacunas contra la gripe aviar, en colaboración con grupos de productores de carne de pollo, huevos y pavo. Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio de mil millones de dólares para mejorar las protecciones en las granjas y frenar la propagación del virus. Sin embargo, la industria avícola, especialmente los productores de carne de pollo, se muestran reacios a adoptar las vacunas debido a las posibles repercusiones en el comercio internacional.
Los expertos en salud animal señalan que la falta de una política clara sobre la vacunación y el sacrificio de aves infectadas genera una situación insostenible. Sin un cambio en las estrategias actuales, el gobierno seguirá sacrificando cada parvada infectada, lo que no solo afecta la salud de las aves, sino que también contribuye al aumento de precios en los huevos. Mientras tanto, la experiencia de otros países que han implementado programas de vacunación, como México y China, podría ofrecer lecciones importantes sobre cómo abordar este problema de manera efectiva y equilibrar las preocupaciones comerciales con la necesidad de proteger la producción avícola.
