
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado el lanzamiento de una importante operación militar contra los militantes hutíes, que tienen su base en Yemen. En un comunicado publicado en su red social Truth Social, Trump detalló que la operación incluye ataques aéreos dirigidos a las «bases, líderes y defensas de misiles» de los hutíes, con el objetivo de restaurar la libertad de navegación en el Canal de Suez, el Mar Rojo y el Golfo de Adén.
Trump acusó a los hutíes de llevar a cabo una «campaña implacable de piratería, violencia y terrorismo contra barcos, aeronaves y drones estadounidenses y de otros países.» Según el presidente, los militantes han obstaculizado la navegación comercial internacional, afirmando que «ha pasado más de un año desde que un barco comercial con bandera estadounidense navegó de forma segura.»
Advertencias y Consecuencias
El mandatario estadounidense exigió a los hutíes que detuvieran sus ataques, advirtiendo que «si no lo hacen, el infierno caerá sobre [los militantes] como nunca antes se ha visto.» Esta declaración subraya la determinación de la administración Trump de actuar con firmeza ante lo que considera una amenaza para la seguridad marítima y la estabilidad en la región.
La intervención militar en Yemen, un país que ha estado sumido en un conflicto devastador desde 2015, plantea interrogantes sobre las implicaciones de esta acción en el contexto geopolítico actual. La situación en Yemen ha atraído la atención internacional debido a la crisis humanitaria que afecta a millones de personas, lo que añade una capa de complejidad a la respuesta militar de Estados Unidos.