A bordo de un tranquilo catamarán, la célebre conservacionista Jane Goodall compartió su más reciente misión: apoyar la supervivencia de la emblemática, y aún vulnerable, nutria marina de Monterey Bay. Esta especie, considerada un símbolo de la región, enfrenta diversos desafíos que amenazan su población.
Durante una visita a Carmel, una conversación entre Goodall y Julie Packard, exdirectora del Acuario de Monterey Bay, reveló la necesidad urgente de atención y apoyo para las nutrias marinas, incluso en un lugar donde son vistas como un ícono. Esta charla motivó la participación de Goodall en el Fondo de Nutria Marina de la Wildlife Conservation Network, cuyo objetivo es restaurar la población de estas criaturas a lo largo de la costa californiana.
Compromiso con la conservación
Goodall ofreció una conferencia con entradas agotadas en el Sunset Center el 7 de abril, en la que abogó por la iniciativa «Esperanza para las Nutrias Marinas». Además, lideró dos safaris marinos, también con aforo completo, en el catamarán de Monterey Bay Eco Tours, que recorre Elkhorn Slough, un humedal rico en biodiversidad y esencial para la fauna local. Durante estas actividades, Goodall destacó la importancia de las nutrias marinas como un componente clave en nuestros ecosistemas.
Wendy Kitchell, propietaria de Monterey Bay Eco Tours, expresó su admiración: «Fue increíblemente inspirador ver a alguien que ha trabajado toda su vida por el bien del planeta. Tenerla en el barco me hizo querer ser una mejor persona». La compañía, con sede en Moss Landing, se dedica a ofrecer tours guiados sobre la vida silvestre con expertos en el área.
Goodall también compartió con los participantes maneras de tomar pequeños pasos hacia la protección del medio ambiente, promoviendo una actitud optimista y la felicidad entre los asistentes. El Fondo de Nutria Marina, el primer fondo de enfoque marino de la Wildlife Conservation Network, destina el 92% de las donaciones a los esfuerzos de conservación sobre el terreno.
Monterey Bay Eco Tours se alinea con la misión de proteger la vida silvestre y el medio ambiente. El catamarán utilizado para las excursiones, conocido como El Cat, es la primera embarcación totalmente eléctrica certificada por la Guardia Costera de Estados Unidos en la costa oeste. «Es una persona increíble, fuerte y vital, que anima a otros a hacer cosas buenas», concluyó Kitchell, resaltando el honor que representa para su empresa que Goodall haya elegido su compañía para resaltar su labor.
