
Las tensiones entre Ucrania y China han aumentado tras las recientes acusaciones del presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, quien afirmó que Pekín está suministrando armas a Rusia. En respuesta, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, desestimó estas afirmaciones como “infundadas y una manipulación política”.
Lin enfatizó que “China nunca ha proporcionado armas letales a ninguna de las partes en el conflicto [de Ucrania] y ha mantenido un estricto control sobre sus exportaciones de doble uso”. El funcionario añadió que Beijing aboga por un “alto el fuego y conversaciones de paz” entre Kiev y Moscú.
Reacciones a las acusaciones de Zelensky
Las declaraciones de Zelensky se produjeron el jueves, cuando mencionó haber recibido “información importante, no muy agradable” sobre el supuesto apoyo militar de China a la Federación Rusa. Esta situación se complica aún más tras la reciente captura de dos ciudadanos chinos por parte de las fuerzas ucranianas, quienes, según Zelensky, estaban combatiendo en el lado ruso. El presidente ucraniano insinuó que “significativamente más” ciudadanos chinos están involucrados en el conflicto del lado de Moscú.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania convocó al encargado de negocios de China en el país para expresar su preocupación por estas alegaciones. En un mensaje publicado en la red social X, el ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Andrey Sibiga, subrayó que esta situación “pone en duda la postura declarada de China a favor de la paz”.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, defendió la posición de China, afirmando que “siempre ha mantenido una postura muy equilibrada, por lo que Zelensky está equivocado”. Pekín ha rechazado las acusaciones de Washington, que sostiene que el comercio entre China y Rusia está contribuyendo a la producción militar de Moscú, reiterando que, a diferencia de los países occidentales, mantiene una postura neutral en el conflicto.