India y Francia han formalizado un acuerdo de defensa por valor de 7.410 millones de dólares para la adquisición de 26 aviones de combate Rafale, según anunciaron funcionarios el pasado lunes. Este acuerdo se produce en un contexto de tensiones crecientes entre India y Pakistán, que han escalado tras un ataque terrorista en la región de Jammu y Cachemira el 22 de abril, que dejó 26 muertos.
El contrato incluye la compra de 22 cazas de un solo asiento y cuatro entrenadores de dos asientos, con entregas programadas para completarse antes de 2031. Además, el acuerdo contempla el mantenimiento de la flota, apoyo logístico y formación de personal, así como la producción nacional de componentes en el marco de las obligaciones de compensación, alineándose con la iniciativa ‘Atmanirbhar Bharat’ (India autosuficiente) promovida por el primer ministro Narendra Modi.
Fortalecimiento de las capacidades navales
Los aviones Rafale, fabricados por la empresa francesa Dassault Aviation, se importarán de manera temporal para satisfacer las necesidades inmediatas de la marina india, actuando como una solución provisional hasta que el país desarrolle y despliegue su propio caza de combate basado en portaaviones de doble motor. En este contexto, la marina india llevó a cabo recientemente un ejercicio de fuego real en el mar Arábigo, que incluyó la participación de varios destructores y fragatas que dispararon misiles de crucero BrahMos.
La incorporación de estos nuevos aviones se integrará en los portaaviones INS Vikrant e INS Vikramaditya, lo que mejorará las capacidades marítimas de India y fortalecerá su capacidad para hacer frente a amenazas potenciales en la región del océano Índico. Este movimiento se enmarca en una serie de decisiones estratégicas, ya que en marzo India aprobó su mayor acuerdo de defensa hasta la fecha, valorado en más de 620.000 millones de rupias (aproximadamente 7.3 mil millones de dólares), para la adquisición de 156 helicópteros de combate ligeros, junto con la formación y el equipamiento asociados.
El acuerdo con Francia no solo refuerza la capacidad militar de India, sino que también subraya la importancia de la cooperación internacional en materia de defensa en un momento en que las dinámicas geopolíticas en la región están cambiando rápidamente. La decisión de India de fortalecer su flota aérea y naval se presenta como una respuesta a las crecientes tensiones en el subcontinente, donde la seguridad y la defensa son temas de máxima prioridad.
