
La capacidad de comunicación de los chimpancés ha sido objeto de estudio por investigadores de varios institutos de renombre, quienes han hallado que estos primates son capaces de combinar sus vocalizaciones de manera que amplían el significado de sus mensajes. Este hallazgo no solo revela la complejidad de la comunicación entre chimpancés, sino que también invita a reflexionar sobre los orígenes del lenguaje humano.
Un estudio revelador en el Parque Nacional de Taï
Un equipo de investigadores de los Institutos Max Planck para la Antropología Evolutiva y para las Ciencias Cognitivas y del Cerebro, así como del Centro de Neurociencia Cognitiva Marc Jeannerod en Francia, llevó a cabo un exhaustivo estudio en el Parque Nacional de Taï, en Costa de Marfil. Durante años, registraron miles de vocalizaciones de tres grupos de chimpancés en su hábitat natural.
El estudio se centra en cómo los chimpancés combinan 12 tipos diferentes de llamados en combinaciones de dos, alterando así el significado original de cada llamado. Según los investigadores, «generar nuevos significados a partir de la combinación de sonidos es una característica distintiva del lenguaje humano». Esta capacidad, aunque no se había documentado en los primates, sugiere que podría haber un sistema de comunicación más elaborado en nuestros parientes más cercanos.
Los investigadores encontraron que los chimpancés son capaces de crear combinaciones composicionales que añaden o aclaran significados. Por ejemplo, un llamado que indica alimentación puede combinarse con otro que indica descanso, generando así un nuevo significado: «alimentación y descanso». Además, existen combinaciones no composicionales que crean significados completamente nuevos, como «nido» que surge de la combinación de «descanso» y «afiliación».
Este avance en la comprensión de la comunicación de los chimpancés contrasta con estudios previos que solo habían observado combinaciones de llamados en situaciones muy específicas, como encuentros con depredadores. La versatilidad de las combinaciones encontradas en este estudio sugiere que la capacidad de comunicar una variedad de significados es más común de lo que se pensaba.
Los autores del estudio destacan que este hallazgo desafía la visión tradicional que consideraba la comunicación de los grandes simios como fijada y vinculada únicamente a sus estados emocionales. En cambio, sugieren que la complejidad del sistema de comunicación de los chimpancés podría indicar que nuestras habilidades lingüísticas tienen raíces más profundas en la evolución, compartidas con el último ancestro común entre humanos y estos grandes simios.
Estos descubrimientos no solo amplían nuestro entendimiento sobre la comunicación animal, sino que también abren la puerta a nuevas investigaciones sobre el origen del lenguaje humano, planteando la posibilidad de que una forma de comunicación compleja ya existía en nuestros antepasados comunes con los chimpancés y bonobos.