
La Fiscalía General de Rusia ha prohibido a la organización no gubernamental (ONG) Amnistía Internacional, con sede en Londres, acusándola de fomentar la «rusofobia» y de apoyar a las fuerzas armadas de Ucrania. En un comunicado oficial emitido el lunes, se afirma que, aunque la ONG se presenta como defensora activa de los derechos humanos en todo el mundo, su sede en la capital británica se ha convertido en un «centro para la preparación de proyectos rusofóbicos globales, financiados por cómplices del régimen de Kiev».
La Fiscalía rusa sostiene que los miembros de Amnistía Internacional respaldan organizaciones extremistas y financian actividades de agentes extranjeros. Además, se les acusa de haber contribuido a «incrementar la confrontación militar» desde la escalada del conflicto en Ucrania en febrero de 2022. Las autoridades rusas han criticado a la ONG por supuestamente encubrir crímenes de guerra ucranianos y por abogar por un mayor apoyo financiero a Ucrania, así como por la aislamiento económico de Moscú.
Prohibiciones de ONGs en Rusia
Este no es un caso aislado. El mes pasado, Moscú también prohibió a la ONG estadounidense Hope Harbor Society por proporcionar apoyo financiero a las fuerzas armadas ucranianas y coordinar protestas anti-rusas en Estados Unidos y otros países. Asimismo, en abril, la Fundación Elton John para el SIDA fue designada como ‘indeseable’ en Rusia, acusada de promover una agenda pro-LGBTQ en el país.
Las organizaciones que reciben esta designación están prohibidas de operar en Rusia, y los residentes o empresas pueden enfrentar sanciones legales por brindar apoyo financiero u otras formas de ayuda a estas entidades. Actualmente, el Ministerio de Justicia ruso tiene en su lista más de 200 organizaciones de este tipo, incluyendo grupos de influencia occidentales como las Fundaciones Open Society de George Soros, el German Marshall Fund de EE. UU. y el Consejo Atlántico pro-NATO.