Los Golden State Warriors consiguieron en junio pasado conquistar frente a los Cavaliers de Lebron James un nuevo título de la NBA, el tercero en los últimos cuatro años. Una serie de entorchados que ha llevado al equipo liderado en la cancha por Stephen Curry a ser comparado con los míticos Bulls de Chicago de Michael Jordan.
Una comparación en la que no quiere entrar, precisamente, el actual técnico de los Warriors, Steve Kerr, quien ha declarado en repetidas ocasiones que su equipo no debería ser comparado con aquellos Bulls que conquistaron hasta seis campeonatos de la NBA en la década de los 90. Hay que recordar que el propio Kerr, curiosamente, formó parte de aquellos Chicago Bulls que conquistaron su quinto anillo en 1996.
¿Es posible la comparativa entre ambos equipos?
Sin embargo, estas comparaciones son francamente inevitables en la nba basketball. No en vano, estamos frente al mejor equipo de la NBA de las últimas décadas y uno de los más destacados de la historia. Un conjunto que este año tratará de acceder por quinta temporada consecutiva a las Finales de la NBA, un hecho que ni tan siquiera consiguieron precisamente los Chicago Bulls en su época dorada.
Recientemente, la casa de apuestas Westgate Las Vegas SuperBook consideró a los Golden State Warriors que ganaron el anillo de la NBA en 2017 como mejor equipo que los Bulls de la temporada 1995/1996. Aquel año, los de Chicago alcanzaron el título después de acabar la temporada regular con un balance de 72 victorias y solo 10 derrotas. La mejor marca regular de la historia hasta que precisamente los Warriors la batieron en 2015 con un balance de 73 victorias y 9 derrotas.
Chicago Bulls vivió una época histórica con Michael Jordan al frente en la década de los 90 del siglo pasado. Una época que les permitió establecer toda una dinastía dentro de la NBA, implantando récords en forma de victorias y títulos que hasta la llegada de los golden state warriors de Steve Kerr ningún equipo pudo superar.
Si tuviéramos que realizar una comparativa entre ambos equipos, hay que partir de la base de que tanto las plantillas como los jugadores y las condiciones contractuales no tienen absolutamente nada que ver entre uno y otro. Además, la situación de la NBA y la competitividad de los equipos es también totalmente diferente.
En la actualidad, se vive una era de baloncesto que dista mucho de la que se tenía a finales del siglo XX. El juego, a día de hoy, se desarrolla a un ritmo totalmente impensable en la década de los 90, mientras que los jugadores son ahora más grandes, más rápidos y más fuertes. Bajos estas premisas, lo cierto es que la comparativa resulta un tanto difícil y subjetiva de realizar.
No obstante, sí que se pueden analizar ambos equipos por separado para tratar de acercar puntos de unión.
Chicago Bulls vs Golden State Warriors
Los Bulls de Chicago contaban con un líder indiscutible en la figura de Michael Jordan. En los Warriors del 2018, en cambio, todas las miradas se centran en dos hombres fundamentalmente: Stephen Curry y Kevin Durant.
En las dos últimas Finales de la NBA, Durant fue reconocido como el Jugador Más Valioso (MVP) con unos promedios de 28.7 puntos, 10.7 rebotes y 7.5 asistencias por partido. Jordan, por su parte, acaparó hasta 6 MVP, con promedios en la final de 33.5 puntos, 4.0 rebotes y 2.3 asistencias.
El gran socio de Jordan en aquellos míticos Bulls era Scottie Pippen. Sin embargo, la relevancia de este no le llevó a estar ni tan siquiera en el mejor quinteto del año en 1998. Quiere esto decir que su papel era importante, pero no tan decisivo como lo puede ser ahora el de un Stephen Curry o un Kevin Durant.
Por otro lado, los Warriors del 2018 se han mostrado muy dominantes en la competición, hasta el punto de barrer en la Final por 4-0 a Lebron James y sus Cavaliers.
Sin olvidar que el banquillo actual de los Warriors es quizás más productivo que el que por entonces tenía los Bulls. Un equipo que dependía bastante de la magia y el buen hacer de Jordan, pero también de la ayuda de Pippen o del carismático Dennis Rodman.
Hay que señalar, por último, que los actuales Golden State Warriors aún parecen tener cuerda para rato. El equipo conserva a sus cuatro principales estrellas (Curry, Durant, Draymond Green y Klay Thompson), por lo que quizás estamos hablando solo del comienzo de su legado.
El propio líder de los Warriors, Stephen Curry, ha manifestado en numerosas ocasiones que se trata de una comparación que a él no le afecta mucho personalmente. Sin embargo, como acabamos de ver es una comparación que se seguirá dando en la NBA, mucho más si los Warriors consiguen un nuevo anillo la próxima campaña.