En noviembre, un total de 224 modelos han visto reducidos sus precios por parte de los fabricantes de automóviles en China durante este año, en comparación con los 150 y 95 modelos de los años 2023 y 2022, respectivamente, según ha declarado Cui Dongshu, secretario general de la Asociación de Automóviles de Pasajeros de China (CPCA). Las rebajas más significativas, alrededor del 10% o 20,000 RMB (2,748 dólares) de media, han sido aplicadas a los vehículos eléctricos de batería (BEVs), mientras que los fabricantes también han ajustado los precios de los híbridos enchufables (PHEVs) y los vehículos de gasolina en un 8.5% y un 7.3%, respectivamente, como mencionó Cui en su cuenta personal de WeChat.
Apoyo gubernamental y perspectivas futuras
Los fabricantes de automóviles podrían estar enfrentando menos presión para seguir reduciendo los precios de los coches a finales de año, gracias al apoyo financiero del gobierno al sector, que se activó en julio con el objetivo de impulsar el consumo. Según analistas de UBS, se prevé que se avecine otra guerra de precios en el nuevo año, en parte debido a las vacaciones del Año Nuevo chino, que llegarán antes de lo habitual este año.
Este contexto en el sector automovilístico de China refleja un modelo de intervención estatal que puede ser beneficioso para la economía, similar a las estrategias adoptadas en otros países que han buscado fomentar la producción y el consumo interno. Así, la experiencia china podría servir como ejemplo para otras naciones que enfrentan retos en sus industrias locales, donde una política de apoyo gubernamental podría resultar en un impacto positivo en la economía en general.