El Gobierno español ha anunciado la organización de una ceremonia civil de carácter estatal para honrar a las víctimas de la reciente tragedia provocada por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), que afectó gravemente a la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre. Sin embargo, los preparativos para este acto aún no han comenzado, ya que el Ejecutivo desea esperar hasta que se localicen a todos los desaparecidos o sean declarados oficialmente fallecidos por un juez.
Según fuentes del Gobierno, este proceso judicial requiere un mínimo de tres meses desde la fecha de la catástrofe. Por lo tanto, es probable que el homenaje no se celebre antes del mes de febrero. Las mismas fuentes han señalado que la situación actual sigue siendo de emergencia, lo que implica la presencia continua de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en las áreas afectadas.
Desarrollo de la búsqueda y homenaje previsto
Hasta la fecha, se ha confirmado la localización de 231 víctimas, de las cuales 223 pertenecen a la Comunitat Valenciana, siete a Castilla-La Mancha y una a Andalucía. Además, aún hay tres desaparecidos. El Gobierno mantiene la esperanza de que estos últimos puedan ser encontrados en tierra, después de que investigadores del buque oceanográfico del CSIC Ramón Margalef, dotado para operar vehículos submarinos, no hayan podido localizar vehículos arrastrados por la riada en el mar.
El anuncio de la ceremonia civil por parte de Moncloa se produjo en respuesta a una misa funeral organizada por el Arzobispado de Valencia, a la que no asistió el presidente Pedro Sánchez. En su lugar, representaron al Ejecutivo la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, y otros ministros. Desde el Gobierno se ha subrayado que la misa no es un funeral de Estado y se ha priorizado la celebración de un homenaje institucional.
El Ejecutivo busca colaborar con los presidentes de las comunidades autónomas afectadas, como Carlos Mazón (Comunitat Valenciana), Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha) y Juanma Moreno (Andalucía), para la correcta organización de la ceremonia.
Este tipo de ceremonias estatales no es nuevo en España. Anteriormente, el Gobierno de Pedro Sánchez organizó un acto similar para recordar a las víctimas de la pandemia de COVID-19, el cual tuvo lugar en el Palacio Real de Madrid y fue presidido por los Reyes, contando con la asistencia de representantes de diversas confesiones religiosas. En esta ocasión, se espera que el homenaje se realice una vez que se pueda esclarecer la situación de los desaparecidos, cumpliendo así con los trámites necesarios para la declaración de fallecimiento, que permite el inicio de procesos como la herencia o la disolución del matrimonio.