Los futuros de acciones en Estados Unidos se mostraron optimistas este lunes, con el bitcoin alcanzando un nuevo récord por encima de los 105,000 dólares, lo que refleja un ambiente de expectativas positivas entre los inversores. Este crecimiento se da en un contexto donde los mercados se preparan para la última reunión del año de la Reserva Federal, programada para esta semana, que se anticipa será clave para definir la dirección de la política monetaria en el futuro cercano.
Los futuros del Nasdaq 100 subieron aproximadamente un 0.3%, después de haber marcado un nuevo récord, mientras que los futuros del S&P 500 y del Dow Jones Industrial Average también experimentaron ligeros incrementos del 0.1%. Este repunte se produce tras una semana de pérdidas para estos índices, destacando la volatilidad que caracteriza a los mercados financieros actuales.
Expectativas de la Reserva Federal
La atención de Wall Street está centrada en la decisión de la Reserva Federal sobre las tasas de interés que se dará a conocer el miércoles, con un 97% de los traders apostando por una reducción de 25 puntos básicos. La interrogante que persiste es si el organismo está dispuesto a revisar su «dot plot», que establece proyecciones de futuras reducciones, en un contexto de inflación persistente y los retos que podrían surgir con la administración de Trump.
Adicionalmente, esta semana se presentará una actualización del índice de Gastos de Consumo Personal (PCE), que es el indicador de inflación preferido por la Reserva Federal, así como datos sobre las ventas minoristas de noviembre, lo que proporcionará información valiosa sobre la resiliencia del consumidor estadounidense.
Por otro lado, China ha reportado cifras que no han cumplido con las expectativas en cuanto a las ventas minoristas, lo que ha influido en los mercados regionales. Pekín ha optado por no implementar las medidas de estímulo que muchos esperaban, mientras que los precios de la vivienda continúan a la baja, aunque la producción industrial ha mostrado un crecimiento, reflejando una compleja situación económica.
En el ámbito corporativo, las acciones de Super Micro Computer Inc. cayeron un 14% en el premercado tras ser excluidas del Nasdaq 100, lo que añade presión a la compañía en un contexto ya complicado por acusaciones de mala práctica contable.
