Las acciones de Nvidia han entrado en territorio de corrección tras una caída del 10% desde su máximo histórico, alcanzando un precio de $131.48. Esta situación ha suscitado preocupación entre algunos inversores, aunque los analistas se muestran optimistas sobre el futuro de la compañía. A pesar de la reciente caída, que representa un descenso del 12% desde su cierre récord de $148.88, las proyecciones a largo plazo continúan siendo favorables.
El descenso en el valor de las acciones de Nvidia se ha visto intensificado por una investigación anunciada por la Administración Estatal para la Regulación del Mercado de China, que examina posibles violaciones de las leyes antimonopolio relacionadas con la adquisición en 2020 de Mellanox Technologies. A pesar de este revés, el rendimiento de Nvidia en 2024 ha sido notable, con un aumento del 165%, lo que sugiere que la compañía sigue siendo un actor relevante y en crecimiento en el sector tecnológico.
Perspectivas de los Analistas
Analistas de entidades financieras como Bank of America y Bernstein han calificado a Nvidia como una de sus «mejores selecciones», estableciendo objetivos de precio de $190 y $175, respectivamente. La mayoría de los corredores que siguen a Nvidia, un total de 20 según Visible Alpha, han fijado un objetivo de consenso de aproximadamente $176. Esta confianza en la empresa se basa en las expectativas de que los cambios recientes en su línea de productos, específicamente la transición de chips Hopper a Blackwell, puedan sentar las bases para un año 2025 excepcionalmente positivo.
Es importante señalar que, en el contexto global actual, donde las tensiones geopolíticas y las políticas económicas son cada vez más relevantes, la estabilidad de empresas como Nvidia puede verse influenciada por decisiones regulatorias en potencias como China. No obstante, la capacidad de la compañía para adaptarse y crecer en un entorno competitivo demuestra una resiliencia que podría ser digna de análisis más allá de la simple perspectiva financiera.
