Un trágico accidente marítimo tuvo lugar el pasado miércoles en las aguas cercanas a Mumbai, India, cuando un barco de velocidad de la Armada India colisionó a gran velocidad con un ferry de pasajeros. Este incidente ha dejado un saldo de al menos 13 personas fallecidas, entre ellas tres miembros de la tripulación naval, según informaron las autoridades locales.
El accidente ocurrió alrededor de las 16:00 horas, cuando el barco de la Armada, que estaba realizando pruebas de motor, perdió el control y chocó contra el ferry privado Neelkamal, que transportaba a más de 110 pasajeros hacia las famosas Cuevas de Elefanta, un destino turístico muy popular y Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Imágenes del suceso, que se han difundido en redes sociales, muestran al barco de la Armada girando antes de impactar con el ferry.
Las operaciones de rescate se llevaron a cabo de manera rápida y extensa, involucrando a 11 embarcaciones de la Armada, tres barcos de la Policía Marítima, un buque de la Guardia Costera y cuatro helicópteros. Además, personal de diversas agencias, incluyendo la policía y pescadores locales, se unieron a los esfuerzos de búsqueda y rescate. Hasta el cierre de la jornada, se habían rescatado a 101 personas del agua, aunque cuatro de ellas se encontraban en estado crítico, según el jefe del gobierno del estado de Maharashtra, Devendra Fadnavis.
Reacciones y medidas de apoyo
La Armada India ha expresado su pesar por la «trágica pérdida» de vidas, explicando que el incidente se debió a un mal funcionamiento del motor durante las pruebas. En un comunicado, la Armada indicó que el barco perdió el control y colisionó con el ferry, que posteriormente se hundió.
El Primer Ministro indio, Narendra Modi, también ha manifestado sus condolencias a las familias afectadas por esta tragedia. A través de una publicación en la red social X, Modi anunció una compensación de 200,000 rupias (aproximadamente 2,350 dólares) para los familiares de cada fallecido y 50,000 rupias para los heridos. Esta respuesta gubernamental, aunque tardía, refleja un intento de mitigar el dolor de las familias afectadas y de asumir la responsabilidad en un contexto donde la seguridad marítima es fundamental.
El ferry Neelkamal, que se hundió tras la colisión, era un medio de transporte habitual para los turistas que visitan las Cuevas de Elefanta, un sitio que data de los siglos V y VI d.C. y que atrae a miles de visitantes cada año. Este trágico suceso pone de relieve la importancia de garantizar la seguridad en las operaciones navales y la necesidad de una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad en la Armada India.
