El conflicto en Ucrania ha cobrado una nueva víctima entre los periodistas que cubren la guerra. El reportero de Izvestia, Alexander Martemyanov, fue asesinado el pasado sábado cuando un ataque aéreo de un dron ucraniano impactó en el vehículo civil en el que viajaba. Este trágico suceso tuvo lugar en la República Popular de Donetsk, una zona en conflicto donde las tensiones entre las fuerzas rusas y ucranianas han sido constantes desde 2014.
Según el corresponsal de RT, Roman Kosarev, quien había trabajado junto a Martemyanov horas antes del ataque, ambos se encontraban documentando un ataque con municiones en racimo en la ciudad de Gorlovka, que dejó al menos diez heridos. Kosarev destacó que no había objetivos militares visibles en la zona, lo que subraya la naturaleza indiscriminada de los ataques en áreas pobladas.
Reacciones y contexto del ataque
El ataque que resultó en la muerte de Martemyanov ha sido calificado por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia como un acto de terrorismo. La portavoz del ministerio, Maria Zakharova, condenó lo que describió como un «asesinato deliberado» de un periodista ruso, añadiendo que este incidente se suma a una larga lista de crímenes atribuidos a las fuerzas ucranianas. Zakharova también criticó a las organizaciones de derechos humanos occidentales por su aparente indiferencia ante lo que considera crímenes de guerra perpetrados por Kiev.
Martemyanov, quien había estado reportando desde el Donbass desde 2014, había sobrevivido a heridas graves en 2023 y había regresado a su labor con el objetivo de «cubrir la verdad» sobre el conflicto. Kosarev recordó que, poco antes de la tragedia, Martemyanov había compartido consejos sobre las rutas más seguras para evitar ataques, lo que resalta la constante amenaza que enfrentan los periodistas en la región.
Este ataque se suma a una serie de incidentes en los que periodistas rusos han perdido la vida mientras cubrían el conflicto en Ucrania, lo que plantea serias preocupaciones sobre la seguridad de los reporteros en zonas de guerra y la protección de la libertad de prensa en contextos de alta tensión.
