Donald Trump Jr. ha criticado duramente al Departamento de Bomberos de Los Ángeles por, según él, priorizar el “virtue signaling” sobre la competencia en medio de una crisis de incendios forestales que ha devastado la ciudad en los últimos días. Este fenómeno ha llevado a la muerte de al menos cinco personas y ha destruido más de 2,000 hogares y negocios, obligando a evacuar a más de 100,000 residentes mientras los vientos de Santa Ana avivan las llamas. El estado ha declarado un estado de emergencia.
En un mensaje publicado en la red social X, Trump Jr. sugirió que la respuesta inadecuada del estado, liderado por los demócratas, a los incendios se debía al enfoque del Departamento de Bomberos en políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI). En su publicación, afirmó: “¿Podemos renombrar DEI a DIE, ya que eso es lo que parece sucederle a las personas que están a merced de aquellos que colocan el virtuosismo ‘woke’ por encima de la competencia?”
Esta crítica ha resonado entre ciertos sectores conservadores, quienes han señalado que California ha gastado aproximadamente 500 millones de dólares en iniciativas de DEI, mientras que medios de comunicación afines a la izquierda han denunciado la predominancia de hombres blancos en el cuerpo de bomberos. El comentarista conservador Matt Walsh, también en X, expresó: “Los Ángeles se propuso deliberadamente excluir a los hombres blancos de convertirse en bomberos, y ahora no tienen suficientes bomberos para evitar que su ciudad se queme hasta los cimientos. DEI es un cáncer que destruye todo lo que toca.”
Críticas a la gestión del gobierno y la atención a la crisis
Además de las críticas al Departamento de Bomberos, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha sido objeto de reproches por su aparente desinterés en la crisis californiana, mientras se centraba en aprobar 500 millones de dólares en ayuda militar para Ucrania. Algunos han señalado que la administración Biden incluso ha proporcionado equipos y herramientas de rescate a 16 departamentos de bomberos ucranianos, mientras que California no ha recibido el apoyo necesario para combatir los incendios.
El gobernador de California, Gavin Newsom, también ha enfrentado acusaciones de priorizar la política ambiental sobre una gestión efectiva de los incendios. El presidente electo Donald Trump ha instado a Newsom a dimitir, argumentando que ha optado por proteger “un pez esencialmente inútil” en lugar de a los ciudadanos del estado, al negarse a firmar una ley que habría permitido el flujo de millones de galones de agua hacia California.
Por su parte, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, ha sido instada a renunciar tras emprender un viaje a África durante el fin de semana, a pesar de las advertencias sobre una tormenta de viento inminente. El año pasado, también recortó el presupuesto del departamento de bomberos en más de 17 millones de dólares.
