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Los empleadores buscan graduados éticos y adaptables en el mercado laboral de 2025

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enero 11, 2025

Según el Informe Anual de Contratación Universitaria 2025 de la Universidad Drexel, las habilidades más valoradas por los empleadores en los candidatos a empleo son el juicio ético, la adaptabilidad y el pensamiento crítico. Este análisis, que representa la 54ª edición del estudio sobre el mercado laboral, proporciona un panorama sobre las tendencias y desafíos que configuran las proyecciones de contratación para este año.

Los hallazgos del informe subrayan la importancia de fomentar un entorno de aprendizaje donde los estudiantes desarrollen no solo habilidades técnicas, sino también integridad y resiliencia, lo que les permitirá hacer contribuciones significativas a la sociedad. Murugan Anandarajan, Ph.D., decano asociado senior para Programas Académicos y Asuntos de la Facultad, y autor principal del informe, expresó que «a medida que observamos ajustes en los salarios iniciales y los incentivos de contratación, se nos recuerda la necesidad de adaptarnos continuamente, asegurando que los estudiantes, incluidos los de Drexel, estén bien preparados para prosperar en un entorno competitivo».

Más de 1,300 organizaciones, que abarcan desde pequeñas empresas hasta grandes corporaciones en sectores como tecnología, finanzas, salud, educación y manufactura, respondieron a una encuesta sobre prácticas de reclutamiento y contratación de estudiantes universitarios.

Condiciones del mercado laboral y expectativas de los empleadores

El informe revela que la demanda de titulados universitarios se mantiene estable, especialmente en campos como tecnología, finanzas y salud. Sin embargo, los empleadores están refinando sus prácticas de contratación para titulados de posgrado, en función de la realidad económica y las necesidades específicas de cada sector. Los resultados también validan la importancia de contratar candidatos con habilidades en alfabetización digital, capaces de navegar entornos complejos.

Sin embargo, el optimismo de los empleadores ha disminuido considerablemente, alcanzando su nivel más bajo desde 2014. Solo el 21% de las organizaciones califica el mercado laboral como «excelente» o «muy bueno». Este descenso refleja la creciente incertidumbre económica y un enfoque cauteloso en la contratación, especialmente en sectores sensibles a fluctuaciones económicas como el retail, la manufactura y la construcción. Asimismo, los bonos de firma y el apoyo a la reubicación han visto reducciones, con menos organizaciones ofreciendo estos incentivos en comparación con años anteriores. El crecimiento salarial también es más conservador, ya que más de la mitad de los empleadores han mantenido los niveles salariales del año anterior, reflejando restricciones presupuestarias.

A pesar de esto, una gran mayoría (88.5%) de las grandes organizaciones encuestadas reportó ofrecer programas estructurados de capacitación y recualificación, indicando una expectativa de aprendizaje continuo. Las empresas de tamaño mediano y pequeño también informaron sobre el apoyo al desarrollo de habilidades, aunque las limitaciones de recursos a menudo restringen el alcance y la profundidad de estos programas.

El informe señala que la integración de la inteligencia artificial en el reclutamiento sigue creciendo, especialmente en las grandes firmas, donde se utiliza para la programación de entrevistas y la selección de currículos. Las organizaciones más pequeñas son más lentas en adoptar estas tecnologías debido a limitaciones de recursos. Las estrategias de reclutamiento virtual son más comunes en las grandes empresas, mientras que las de tamaño mediano y pequeño dependen de métodos tradicionales. No obstante, los autores advierten a los candidatos que eviten utilizar herramientas de inteligencia artificial similares para la preparación de entrevistas.

Por último, los empleadores señalaron que la contratación de talento proveniente de grupos subrepresentados ha disminuido del 54% en el año anterior al 44% en 2025. Los autores atribuyen este cambio, en parte, a la reducción de la inversión en iniciativas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) por parte de algunas organizaciones, especialmente aquellas con prácticas de contratación cautelosas.

El informe recomienda que las universidades pongan énfasis en el desarrollo de habilidades clave, como la adaptabilidad, el juicio ético y la profesionalidad, al mismo tiempo que animan a los estudiantes a participar en prácticas y programas de cooperación que se alineen con las habilidades más demandadas. Se debe apoyar a los estudiantes en su competencia en comunicación virtual para navegar eficazmente en entornos de trabajo híbridos y remotos.

Anandarajan concluye que «los estudiantes deben centrarse en desarrollar habilidades técnicas y de autogestión, mientras participan activamente en oportunidades de recualificación, como certificaciones en línea y redes, para destacarse en un mercado competitivo». Además, los empleadores deben considerar invertir en programas estructurados de capacitación para fomentar una fuerza laboral resiliente, aprovechar la inteligencia artificial en los procesos de reclutamiento, proporcionando orientaciones claras sobre el uso aceptable de herramientas de IA para los candidatos, y equilibrar estrategias de reclutamiento en persona y virtual para acceder a un grupo de talentos más amplio, considerando la posibilidad de ofrecer arreglos de trabajo híbridos para atraer a los mejores graduados.

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