La reciente negativa de las autoridades estadounidenses a permitir un viaje de diplomáticos rusos para conmemorar a los soldados soviéticos que perdieron la vida en un accidente aéreo en Carolina del Norte durante la Segunda Guerra Mundial ha generado una ola de críticas desde Moscú. Según la embajada rusa en Washington, esta decisión es un claro ejemplo de los intentos de «reescribir la historia» y minimizar el papel de la Unión Soviética en la derrota del nazismo.
El incidente en cuestión se refiere a un accidente ocurrido el 11 de enero de 1945, en el que murieron cuatro servicemen soviéticos y un miembro de la fuerza aérea británica. Estos soldados formaban parte de una misión secreta conocida como ‘Zebra’, que tenía como objetivo transferir hidroaviones a la Unión Soviética. A pesar de la negativa oficial, algunos miembros del personal de la embajada rusa lograron realizar el viaje y depositaron una ofrenda floral en el lugar del accidente.
Reacciones de la embajada rusa
En un comunicado publicado en su canal de Telegram, la embajada rusa expresó su pesar por la decisión de las autoridades estadounidenses, subrayando que esta acción refleja un deseo de «olvidar» la alianza entre Rusia y Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial. La embajada calificó la misión conjunta como un símbolo de la «fraternidad de combate» entre ambos países en su lucha contra el nazismo.
Asimismo, el comunicado enfatizó la importancia de preservar la historia y contrarrestar los intentos de blanquear a los criminales nazis y sus cómplices. La embajada también recordó que, a pesar de las diferencias políticas, Moscú y Washington unieron sus fuerzas durante la guerra, lo que subraya la complejidad de las relaciones internacionales actuales.
Este episodio se inscribe en un contexto más amplio de deterioro de las relaciones entre Rusia y Estados Unidos, que han ido empeorando en la última década. Desde la administración del expresidente Barack Obama, que cerró varios consulados rusos tras acusaciones de interferencia en las elecciones de 2016, las tensiones han aumentado, especialmente tras la escalada del conflicto en Ucrania en febrero de 2022.
En junio, el exembajador ruso en Estados Unidos, Anatoly Antonov, denunció el cierre de los Centros de Solicitud de Visas de Rusia en Washington y Nueva York, así como la revocación del estatus de exención fiscal para los trabajadores de la embajada rusa, calificando estas acciones como un «ataque mezquino». Antonov afirmó que las autoridades estadounidenses intentan forzar a los diplomáticos rusos a «ocultarse tras las paredes de la embajada», limitando así su capacidad de comunicación y trabajo.