La Sociedad de Autores del Reino Unido ha lanzado un llamamiento para que se reconozca el trabajo de los escritores fantasma detrás de las obras literarias de celebridades. Este asunto ha cobrado relevancia en un contexto donde las listas de los libros más vendidos están cada vez más dominadas por figuras del entretenimiento, como actores y músicos, que han decidido adentrarse en el mundo de la literatura.
El reciente lanzamiento de «Nineteen Steps», la primera novela de la actriz Millie Bobby Brown, ha reavivado el debate sobre la falta de reconocimiento de estos escritores. El libro, que se basa en la experiencia de la abuela de Bobby Brown durante el desastre del metro de Bethnal Green en 1943, fue en realidad escrito por Kathleen McGurl, cuyo nombre fue eliminado de los créditos para que el de la actriz pudiera atraer más ventas.
Este fenómeno no es nuevo. Las editoriales han recurrido a escritores fantasma para crear obras que, aunque firmadas por celebridades, son en realidad producto de la labor de otros. El éxito de «Nineteen Steps» ha llevado incluso a que se planifique su adaptación cinematográfica, un objetivo que parece ser el motor detrás de muchos de estos proyectos. Ejemplos similares se pueden encontrar en el caso del príncipe Harry, cuyo libro «Spare» se convirtió en un gran éxito gracias al trabajo de un escritor fantasma.
La Sociedad de Autores ha señalado que, aunque las obras escritas por celebridades pueden tener un impacto positivo al fomentar la lectura entre los más jóvenes, es fundamental que se reconozca el trabajo de quienes realmente escriben estos libros. Según la organización, dar crédito a los escritores fantasma no solo es justo, sino que podría enriquecer la experiencia de lectura y beneficiar a todos los autores y editores.
Abbie Longstaff, presidenta del grupo de Escritores e Ilustradores de la Sociedad de Autores, enfatizó la importancia de reconocer la creatividad y el esfuerzo detrás de cada libro. En un momento en que la inteligencia artificial comienza a generar contenido, es crucial que se valore el trabajo humano que da vida a las historias. La presidenta también mencionó el reciente reconocimiento del escritor fantasma de Johnny Sexton en los Irish Book Awards como un ejemplo positivo en el que tanto la narrativa como la prosa fueron celebradas.
Mark McCrum, coautor de las memorias del cantante Robbie Williams, añadió que un simple reconocimiento en la portada, como un «con» o un crédito compartido en las listas de más vendidos, podría ser un incentivo significativo para los escritores fantasma. Esto no solo les proporcionaría justicia por su trabajo, sino que también ofrecería al público una representación más honesta de cómo se gestan estas obras literarias.
