El gobierno del estado de Tamil Nadu, en el sureste de la India, ha lanzado un llamativo desafío a arqueólogos y lingüistas: descifrar un antiguo lenguaje de la civilización del Valle del Indo, que data de hace 5,300 años, con una recompensa de 960,000 euros (1 millón de dólares) para quien logre esta hazaña. Esta oferta ha surgido tras la reciente publicación de un estudio que sugiere similitudes entre los signos indus y las inscripciones encontradas en la cerámica local, lo que ha reavivado el interés por un sistema de escritura que ha eludido a los investigadores durante décadas.
La civilización del Valle del Indo, también conocida como harappana, fue una de las primeras sociedades urbanas del mundo, habitando lo que hoy es el noroeste de la India y Pakistán. Sus habitantes, que se dedicaban a la agricultura y el comercio, desarrollaron una cultura sofisticada, aunque los motivos de su repentina desaparición siguen siendo un misterio, ya que no se ha encontrado evidencia de guerras ni desastres naturales que expliquen su declive.
El sistema de escritura indus, que está compuesto por alrededor de 4,000 inscripciones cortas, se encuentra principalmente grabado en objetos pequeños como sellos y cerámica. A lo largo de los años, numerosas teorías han intentado relacionar esta escritura con los primeros sistemas de Brahmi, lenguas indoeuropeas y el sumerio. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos realizados por lingüistas y arqueólogos, el significado de estos signos sigue siendo un enigma, y su desciframiento podría proporcionar una valiosa comprensión sobre la organización política y las creencias de esta antigua civilización.
El anuncio realizado por MK Stalin, el ministro jefe de Tamil Nadu, ha despertado el entusiasmo en la comunidad académica y más allá. La posibilidad de desentrañar los secretos de un lenguaje perdido durante milenios no solo representa un desafío intelectual, sino que también podría abrir nuevas avenidas para la investigación histórica y cultural. La comparación con el descubrimiento de la Piedra de Rosetta, que permitió descifrar los jeroglíficos egipcios, se convierte en un punto de referencia para aquellos que se embarquen en esta tarea monumental.
A medida que se intensifica el interés por el premio y la posibilidad de resolver este antiguo misterio, la comunidad científica observa con atención los avances que puedan surgir en este campo. La historia y el legado de la civilización del Valle del Indo continúan fascinando a investigadores y entusiastas de la historia, y esta nueva iniciativa podría ser el catalizador que revele su rica y compleja narrativa.
