Caroline Kennedy, la única hija del expresidente estadounidense John F. Kennedy, ha hecho un llamamiento contundente a los senadores de Estados Unidos para que rechacen la nominación de su primo, Robert F. Kennedy Jr., como secretario de Salud de la Administración Trump. En una carta enviada este martes, Caroline expresa su preocupación sobre la idoneidad de su primo para el cargo, destacando su historial personal y profesional.
En su misiva, Caroline Kennedy, quien ha mantenido una postura reservada sobre los asuntos familiares en el pasado, se siente obligada a hablar debido a las experiencias que ha tenido con Robert a lo largo de los años. Según sus declaraciones, Robert ha llevado a varios familiares por el camino de la adicción a las drogas, lo que le lleva a cuestionar su capacidad para liderar un departamento tan crucial como el de Salud.
Críticas a la conducta de Robert F. Kennedy Jr.
Caroline describe a su primo como un «depredador», señalando que su hogar se convirtió en un centro de actividad relacionada con las drogas. En su carta, menciona que «su sótano, su garaje y su dormitorio eran los centros de la acción», donde había acceso a sustancias ilegales. Además, critica su comportamiento al afirmar que disfrutaba mostrando cómo alimentaba a sus halcones con animales vivos, lo que refleja una falta de empatía y responsabilidad.
La hija de JFK también se refiere a Robert como «adicto a la atención y al poder», y lo acusa de dar «consejos hipócritas» en su cruzada contra la vacunación, a pesar de que él mismo ha vacunado a sus propios hijos. Caroline sostiene que esta postura le ha permitido enriquecerse, lo que añade una capa de hipocresía a su discurso público.
A pesar de no haber criticado a su primo durante la campaña presidencial, Caroline ha calificado sus opiniones sobre las vacunas como «peligrosas», argumentando que van en contra de la opinión de la mayoría de los estadounidenses. En su carta, enfatiza que tanto su padre como algunos de sus tíos, quienes «dieron sus vidas por el servicio público», estarían «disgustados» con la situación actual.
Robert F. Kennedy Jr. se enfrenta a audiencias de confirmación ante el Senado, donde deberá defender su nominación. Para ser confirmado, solo puede perder tres votos republicanos, en caso de que todos los demócratas voten en su contra. La presión sobre él es considerable, especialmente tras las declaraciones de su prima, que han puesto en tela de juicio su idoneidad para un cargo tan relevante en el ámbito de la salud pública.
