Investigadores han detectado compuestos orgánicos y minerales esenciales para la vida en muestras sin precedentes recolectadas del asteroide cercano a la Tierra, Bennu. Este hallazgo proporciona evidencia adicional a la teoría de que los asteroides pudieron haber entregado los componentes básicos de la vida a nuestro planeta en sus primeros días. Las muestras obtenidas también ofrecen una ventana para comprender los procesos químicos y biológicos que ya estaban en marcha mientras los rocosos cuerpos celestes se movían de manera caótica durante los primeros días del sistema solar.
Los análisis preliminares de las rocas y el polvo recolectados en el último año han revelado que el asteroide contiene agua, así como carbono, nitrógeno y otras materias orgánicas. Sin embargo, la composición química de estos materiales orgánicos seguía siendo en gran parte desconocida. Nuevas investigaciones han revelado que Bennu alberga muchos de los bloques químicos de la vida, como aminoácidos y componentes que se encuentran en el ADN, según el Dr. Daniel P. Glavin, científico senior del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Maryland.
Un vistazo a la biología extraterrestre
Bennu, un asteroide rico en carbono, es conocido como un asteroide de tipo «rubble pile». Se cree que Bennu era parte de un asteroide «padre» más grande que perdió algunos fragmentos debido a un impacto, y luego, esos trozos se agruparon, formando una especie de montón de escombros que se mantiene débilmente unido por la gravedad. La muestra fue recolectada en octubre de 2020 por la misión OSIRIS-REx, que marcó la primera vez que Estados Unidos envió una nave espacial para aterrizar brevemente en un asteroide y recoger material. En septiembre de 2023, la nave OSIRIS-REx dejó caer una cápsula que paracaidó en el desierto de Utah.
Los científicos encontraron que la cápsula contenía el doble de la cantidad de material esperada, lo que equivale a aproximadamente 120 gramos. A partir de estos estudios, el equipo de Glavin detectó miles de compuestos moleculares orgánicos, incluidos 33 aminoácidos. Este descubrimiento sugiere que los ingredientes básicos de la vida pudieron haberse combinado de maneras complejas en Bennu, pero aún se necesita más investigación para determinar cómo se formaron y evolucionaron estos compuestos orgánicos en el asteroide.
